Un empleado de limpieza halló a Scott Krulcik, de 22 años, inconsciente en su terminal de trabajo del sexto piso del edificio en donde Google tiene unas de sus tantas oficinas, que se encuentra en la avenida ocho, cerca de la calle 16 (oeste), de la ciudad de Nueva York. El hallazgo ocurrió a eso de las 9 de la noche del viernes 7 de diciembre de este 2018, indicaron fuentes policiacas.

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El trabajador de limpieza intentó reanimar al ingeniero de software pero sin poder lograr nada. Krulcik fue pronunciado muerto en donde fue hallado. Su cuerpo no presentaba ningún tipo de trauma y aparentemente no hay ningún ilícito o acto criminal involucrado. Sin embargo, por ley el Forense de la ciudad hará la autopsia correspondiente para hallar la causa de la muerte.

Krulcik, de Saratoga Springs, NY, quien vivía en el West Village, no tenía ningún historial médico preocupante o alguna condición específica. Tampoco presentaba ningún cuadro de abuso de drogas, indicó la policía. Vecinos de Krulcik estaban azorados por la noticia. «Oh, Dios mío, esto es tan triste. Yo lo veía de tiempo en tiempo por los pasillos», dijo uno de los residentes que se mudó al edificio en el otoño pasado. «Se veía como en las fotos. Era un buen hombre, un joven vibrante», comentó uno de los que lo conocieron.

Krulcik vivía en el quinto piso con un compañero de cuarto, quien también era ingeniero de Google y al igual que Krulcik, graduado de Carnegie Mellon, la universidad con sede en Pittsburgh, Pa. El malogrado ingeniero se unió a Google como un trabajador interno en mayo del 2016, mientras que seguía tomando clases en Carnegie Mellon, de acuerdo a su sitio personal web. Regresó a Google de nuevo el siguiente verano y se graduó en mayo, con una licenciatura en ciencias de la computación.

Scott Krulcik era una persona muy abierta y muy curiosa intelectualmente sobre una serie de tópicos en donde muchas veces había una intersección de tecnología y políticas públicas hasta problemas locales, como por ejemplo, un árbol con las ramas rotas. «Esta es la primera vez que he visto la nieve antes de que los árboles pierdan sus hojas – pues las ramas están todas rotas en las calles», tuiteó en noviembre.