Ya hemos explicado cuál es la diferencia entre un hacker y un cracker, y ahora que sabes bien la porque son conceptos diferentes no debe sorprenderte que los gobiernos estén buscando hackers para defenderse de los ataques cibernéticos y de aprovechar sus talentos para espiar a otros gobiernos.

Este año conocimos a Wannacry y algunas filtraciones de Wikileaks sobre los programas espías de la CIA, que son algunos de los casos en los que se han visto inmiscuidos gobiernos y agencias gubernamentales con la excusa de buscar defender a su país de ciberataques, aunque más bien parece que su propósito es atacar y robar información de otros gobiernos, de ahí que se están buscando personas capaces de hacer frente a este tipo de ciberataques.

El problema para los gobiernos es que conforme pasa el tiempo, los hackers parecen estar más interesados en trabajar en empresas como Google o Facebook que para el mismo gobierno, al menos así lo reporta un informe publicado GCHQ, uno de los servicios de inteligencia del Reino Unido.

El Government Communications Headquarters (GCHQ por sus siglas en inglés), se especializa en la protección de las comunicaciones de Inglaterra, de ahí que tengan un especial interés en reclutar hackers desde hace varios años. El problema para la GCHQ y otras agencias de inteligencia británicas que buscan hackers es que no pueden competir contra el sector privado, pues empresas como Google o Facebook no solo llevan más tiempo reclutando hackers, sino que no escatiman en inversiones en seguridad año con año.

Ciberataques, Bitcoins y el crimen perfecto

Esto significa que un hacker puede ganar hasta 5 veces más de lo ofrecido por el gobierno británico trabajando para una empresa de tecnología en Silicon Valley, de ahí que muchos hackers con gran potencial terminen convirtiéndose en jefes de seguridad de Google o Facebook en lugar de buscar defender a su país contra un ciberataque.

Según reporta el GCHQ en su último informe, el reclutamiento de personal especializado (hackers) bajó un 22% entre 2015 y 2016. Por esta razón las expectativas son algo más modestas para los próximos cuatro años, y esperan ampliar el personal un 14% durante este periodo de tiempo.

El problema para esta y otras agencias de inteligencia en el mundo no son únicamente los grandes sueldos que ofrecen las compañías de Silicon Valley, sino que la cultura hacker es parte del ceño de estas empresas, pues muchas de ellas empezaron así, y grandes productos han nacido de la misma manera, por lo que sin duda alguna un hacker preferirá ser exitoso en Silicon Valley, que ser un James Bond con mucho más anonimato en el gobierno de su país.