El iPhone mostró su primer descenso en sus cifras de ventas a principios de este año, dato que hoy reitera el más reciente estudio la firma de análisis Kantar Worldpanel.

La consultoría encontró que el equipo insignia de Apple cayó ventas, en comparación con la opción de Samsung. El reporte indica que, durante el segundo trimestre de este año, el 16% de los consumidores norteamericanos adquirió un Galaxy S7 o un S7 Edge, en contraste con el 14.6% que compró un iPhone 6s o un 6s Plus.

Kantar también reveló que Samsung aumentó su cuota de mercado en Estados Unidos con 37%, mientras que la de Apple es de 29%.

En cuanto a la fidelidad y compromiso con la marca, el 88% de los clientes de Apple está dispuesto a comprar un nuevo iPhone; en tanto, el 86% de aquellos que adquieren un equipo de Samsung pretende adquirir nuevamente un Galaxy.

Este último dato es todo un logro para la surcoreana, que solía ser muy buena en la venta de nuevos dispositivos, pero muy malo ofreciendo soporte y creando lealtad con los clientes.

Sin embargo, para Lauren Guenveur, analista móvil Kantar Worldpanel, la verdadera batalla no está entre Samsung y Apple.

«Con la desaceleración del crecimiento en los mercados desarrollados y las marcas chinas que poseen la mayor parte del mercado de teléfonos inteligentes en el mundo, Apple y Samsung tienen menos de qué preocuparse el uno del otro en el futuro, y mucho más que preocuparse de otros competidores. Ante un panorama como éste, lo que queda por ver es cómo se desarrollarán las ventas en mercados emergentes, como América Latina e India», concluyó.

Referencias: Kantar, Wireless Week