Me acaba de llegar un reporte que elabora la firma The Competitive Intelligence Unit (The-CIU) que muestra el estado actual del mercado de telefonía celular en este país donde, en números redondos, existen 104 millones de líneas. El “pastel” se divide de la siguiente forma: Telcel tiene el 70% (72.8 millones de clientes) seguido de Movistar con 19% (18.8 millones), justo después Iusacell con el 8% (8.3 millones) y Nextel con el 3% restante (3.1 millones).
Complicada situación para unos y para otros. Telcel ha tenido que cambiar porque la ley se lo exige. Por ejemplo, ya no puede vender teléfonos “bloqueados” (era absurdo comprar un “Amigo Kit” y que además estuviera bloqueado) y tuvo que eliminar el costo del roaming a nivel nacional. Sigue siendo el más grande pero después de muchos años, parece que dejó de ser el consentido.
Movistar atrajo un mercado muy diferente al del usuario de smartphones y se fue a la guerra de tarifas desde un principio para ser “el más barato” de la cuadra. Poco a poco está diciéndole al mundo que sí tiene datos y que sí vende smartphones, pero eso le tomará tiempo y dinero, sin duda. Aun así, más de 18 millones de clientes es una cantidad muy respetable y envidiable.
Iusacell después de sus consolidaciones está en la lucha, con planes innovadores y una gran confusión con la denominación “4G” de sus redes y servicios (qué no son LTE). De cualquier forma, parece que la cobertura es su punto débil y tendrá que seguir invirtiendo si quiere competir con los dos anteriores. O tal vez no quiere, quedarse como el tercero es buena opción.
Nextel si la tiene complicada. Los servicios de “trunking” o el famoso radio se vuelve cada vez más obsoleto y es que cada vez hablamos menos y mensajeamos y escribimos más. Tiene su sector de mercado bastante bien definido y con base en tarifas planas y “todo lo que puedas hablar” estuvo mucho de moda entre ciertos sectores de la población. Ahora quieren atraer clientes con su plan de 600 pesos (6GB, 600 minutos y 600 mensajes).
¿Qué tienen en común todas estas empresas? Vamos, seamos sinceros… un servicio a clientes que deja mucho, pero mucho que desear. He sido cliente de todas, menos Nextel, y en los “centros de atención” uno va a perder el tiempo, a llevar a cabo procedimientos absurdos, obsoletos, que a veces parecen de dependencia pública y en muchas otras ocasiones, simplemente “le hacen el favor” de atenderlo. Todos tenemos “historias de terror” con Telcel, Movistar, Iusacell y Nextel.
No estoy hablando del servicio como tal, es decir, de la cobertura de la red y velocidad. Eso, es materia de otro artículo con muchos, pero muchos comentarios para todos estos carriers.
Entonces, ¿qué pasa? Pues parece ser que ahora sí llega al mercado local el primer operador móvil virtual (en inglés Mobile Virtual Network Operator o MVNO) que no es otra cosa que una empresa que ofrece servicios de telefonía celular, pero no es dueña de la red (antenas, conexiones, etc.) sino que la renta a un tercero. De estos existen varios en el mundo y en México está a punto de comenzar a operar Virgin Mobile, una de las muchas empresas del legendario empresario británico Richard Branson, dueño del imperio Virgin Group.
Virgin Mobile rentará su red a Movistar y llega al mercado con una actitud de servicio completamente distinta a los demás (o al menos eso podemos darnos cuenta en su comunicación hasta la fecha). “El día es para dormir, la noche para lo demás. Chambea en el turno nocturno del Rockzone” dicen en Twitter, “Llegamos a México y venimos con todo. Regístrate como va y te ponemos Whatsapp de a grapa”.
El diseño de su sitio Web me recuerda al menú de las tiendas de café “Cielito” y en general, no parece un operador de telefonía móvil. ¿Su mercado? Los chavos y los que quieren vivir una experiencia diferente. ¿Quién gana y quién pierde? Sin duda, el más grande, Telcel, es el que más usuarios podrá perder, Movistar y Iusacell también podrán dejar algunos. ¿Llegó para quedarse Virgin Mobile? ¿Los competidores se van a quedar con los brazos cruzados y a darle la bienvenida?
No lo sé. Es la primera vez que llega una de estas empresas a México y por lo que he podido escuchar de otros países, no les ha ido ni bien ni mal, es decir, son una opción más. El modelo de negocio es no invertir en la red sino rentarla. Dar un mejor servicio, o, digamos, dar servicio. Es un negocio que hoy está y mañana puede no estar, al fin que no son dueños de nada y no estoy diciendo que eso sea malo, ojo, los negocios existen para ganar dinero y esta puede ser una forma muy rentable. Falta ver qué le ofrecen al mercado, si se meten a competir al complejo sector de los precios por minuto o si -como es la tendencia- se enfocarán en los datos. Después de todo, al mercado que le quieren llegar es naturalmente consumidor de bytes, no de minutos ni SMS.
La medida del éxito de Virgin Mobile en México la podremos medir de forma muy simple: viendo como reaccionan Telcel, Movistar, Iusacell y Nextel.
(La ilustración la tomé de la página en Facebook de Virgin Mobile México)