Pacific Rim, la nueva película de Guillermo del Toro, se estrenó hoy, y aunque ha sido halagada por su historia original, calidad artística y el hecho de poder entender los motivos detrás de las acciones de los personajes, hay otro elemento sin el cual la película no sería ni la mitad de buena: la tecnología. Tanto la que supuestamente existe en el mundo que ha creado del Toro, como la que se utilizó en la vida real para construirlo.

Básicamente, la historia se desarrolla en un futuro no muy distante, en donde un portal interdimensional se abre en el fondo del Océano Pacífico dejando salir a un montón de enormes monstruos llamados kaiju (bestias cuyo nombre viene de un género cinematográfico japonés) que atacan al planeta. Para combatirlos, la humanidad pone a un lado sus diferencias y crea a los Jaegers, robots igual de gigantes piloteados por dos personas que comparten una conexión mental llamada “enlace neural”.

Entre la supuesta tecnología que existe en el mundo como post-apocalíptico de Pacific Rim están desde luego los Jaegers (robots gigantes), pero también hay otros elementos relacionados a la ciencia, el diseño y los gadgets que hacen de la película un viaje avanzado y futurista. Algo curioso y especial de Pacific Rim es que en vez de explicar la tecnología que supuestamente existe, del Toro da una breve introducción y luego la muestra más que nada de forma visual al más puro estilo de la frase “ver para creer”.

Las imágenes son claras; en medio del caos, algunas personas usan los restos de robots destrozados como casas y eso convierte al paisaje y la arquitectura en algo inusual. En cuanto a ciencia, Newton Geiszler y Gottlieb son dos personajes con el arquetipo de investigadores perturbados que buscan formas menos explosivas de destrozar a los kaiju. En el ámbito de los gadgets, las máquinas usan armas y tecnologías específicas que se repiten con cada ataque y por eso, dejan en claro que los robots son controlados por humanos y que, al igual que en la realidad, las capacidades de las máquinas también están limitadas.

Los robots humanoides y gigantescos llamados Jaeger tienen ciertas similitudes con los Transformers e incluso con los Megazord que solían usar los Power Rangers (mucho más avanzados y con toda proporción guardada, claro), pero para crearlos, del Toro se basó mucho en máquinas de la Segunda Guerra Mundial y trató de darle la personalidad de su respectivo país a cada Jaeger.

“Empezamos refiriéndonos a maquinaria muy cercana a la Segunda Guerra Mundial, submarinos, reactores nucleares, aviones de bombardeo, etcétera, y tratamos de darle la personalidad de cada país a los Jaegers. Por ejemplo, el tanque de guerra ruso es una mezcla de un tanque serie T con un reactor nuclear”, comentó del Toro en una entrevista para unocero.com.

Los monitores holográficos y el enlace neural están basados en sistemas de control ya existentes, como el de DARPA, que une a un piloto con su avión. Guillermo del Toro explicó el concepto para unocero.com. “Están basados en sistemas de control que ya existen [los Jaegers], en DARPA donde se une el piloto del jet al avión y el avión responde a los movimientos del sistema nervioso del piloto.” El sistema es un poco complicado ya que tal tecnología aún no existe en verdad y del Toro intentó basarse en robots reales (como los que se usan para las microcirugías) para crear a los Jaegers.

Claro que la base científica tenía que ser coherente, y ya que mover una máquina así de grande requeriría mucha esfuerzo de una sola persona, del Toro consideró usar dos. “Lo que yo pensé es: si tienes que mover una maquinaria así de grande, la carga neural para una sola persona es demasiada y viene un derrame cerebral y todo eso. Entonces lo que pensé es que se necesitan dos pilotos, uno para el hemisferio izquierdo y otro para el derecho que se conectan a través de un puente neural.”

Los efectos especiales y la animación son excelentes y junto con toda la película, han sido festejados por músicos, actores y otras celebridades. Hideo Kojima, creador de Metal Gear, declaró a través de su Twitter que nunca imaginó ver una película así. “Esta no es una película que simplemente deba ser respetada, más que nada, nos deja soñar con el futuro de las películas de entretenimiento.”

Comparada en cuanto a grandeza e innovación –tanto tecnológica como visual– con películas clásicas de kaiju e importantes representantes ochenteras de la ciencia ficción, Pacific Rim es un lanzamiento que no sólo es importante para 2013, sino también para marcar a toda una generación. De la misma forma que Blade Runner causó un impacto en su tiempo con la introducción de androides llamados replicantes y pantallas LED gigantes en las ciudades, los robots y conexiones de Pacific Rim pueden definir parámetros de lo que se esperará de la ciencia y la tecnología en un futuro.