Marte es fascinante y las naves que la NASA ha mandado han revelado muchísimos detalles del planeta rojo. Se han desmentido mitos y se han encontrado nuevos retos para entender la atmósfera marciana, lo que ha pasado en el planeta y la aparente imposibilidad de la vida. La última sonda que ha llegado a la superficie de Marte ha sido el Curiosity, que es casi del tamaño de un volkswagen sedán, y éste ha mandado miles de fotos de la zona que ha investigado. Sin embargo, aparentemente la sonda de la NASA tiene ahora un corto circuito.

La NASA ha puesto en estado de espera al Curiosity por un par de días buscando determinar las causas y severidad de un reciente corto circuito. La agencia espacial norteamericana ha dicho que en una operación reciente de toma de una muestra, la nave sufrió un problema eléctrico que activó las computadoras del Curiosity para que se apagaran automáticamente.

De acuerdo a la NASA, el corto circuito ocurrió el 27 de febrero mientras el Curiosity transfería polvo de una roca recolectada en el área llamada «pico telegrafo», a través de su taladro, para pasarlo a su laboratorio interno de energía nuclear de la nave investigadora. Durante la operación, la «mano» del Curiosity, que es la parte final del brazo robótico del sistema, estaba realizando una maniobra de movimiento para depositar el polvo de la roca en el sistema recolector, para procesarlo entonces en un análisis.

La telemetría indicó que un corto circuito causó una irregularidad en la corriente eléctrica de la sonda, lo que hizo que una respuesta preprogramada terminara la operación del robot y se apagara. La agencia está ahora estudiando los datos para determinar la causa y la severidad de la dificultad. De acuerdo a lo estimado, el peor escenario sería el que el brazo robótico estuviese restringido para el futuro si se encuentra que la falla depende de este mecanismo. Todo parece indicar que la misión podría seguir sin problemas.

«Estamos haciendo pruebas con el vehículo en su configuración presente antes de mover el brazo o en mover el Curiosity», dice el jefe del proyecto Jim Erickson, del JPL de la NASA, en Pasadena, California. «Esto nos puede dar una mejor oportunidad para determinar dónde se encuentra el corto circuito».

Referencias:

NASA
Gizmag