Por primera vez se ha confirmado, de forma independiente, las posibles razones para la existencia de metano en el planeta rojo. Por ejemplo, en la Tierra, el metano es una de las claves de la vida, pues este gas es emitido por los seres vivos. Pero incluso, aunque el metano en Marte fuese producto de otro proceso, es bastante razonable pensar que la superficie del planeta es por mucho más activa de lo que se había pensado antes.

En junio del 2013, la sonda Curiosity, ese fantástico robot que está en la superficie marciana, cerca del cráter Gale, hizo un hallazgo sobre la existencia de gas metano. Los científicos también usaron un espectrómetro en la nave para observar el metano en la atmósfera marciana, cerca de Gale. Pudieron incluso investigar la fuente potencial del metano, usando un modelo numérico y análisis geológico, lo que sugiere que viene de una falla cerca del cráter Gale, que es de donde sale el gas y se distribuye hacia la atmósfera.

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La discusión ahora es si este gas metano es producto de la actividad de micro-organismos o bien, se trata simplemente de reacciones geoquímica bajo la tierra. En caso de venir de los micro-organismos, los científicos podrían ser capaces de seguir el trazo del gas en un intento para descubrir si algún tipo de manifestación de vida podría esconderse bajo la superficie marciana. Pero los investigadores en un nuevo artículo, titulado ‘Independent confirmation of a methane spike on Mars and a source region east of Gale Crater’ (Confirmación independiente de metano en Marte en una región al este del cráter Gale), que se publica en Nature Geoscience, notan que no es posible decidir nada mientras no se encuentre la fuente del gas.

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Los científicos mandaron el orbitador ExoMars al planeta rojo en el 2016, con la esperanza de poder entender mejor la operación del metano en la superficie y posiblemente poder saber de dónde está emergiendo. Y así como se confirman las detecciones del gas hace más de diez años, se busca ahora los lugares donde se producen estas emisiones, en donde además, se sugiere que el metano en Marte no podría estar emergiendo de la forma esperada.

Podría pasar que en lugar de que hubiese grandes emisiones de metano y que entonces estuviesen presentes en todo Marte, podría pasar que fuesen cortas emisiones, aunque no se sepa qué proceso es el que las produce, dicen los investigadores.