Ya hace más de cincuenta años, cuando los videojuegos comenzaban a nacer, pero llegando a nuestras vidas en los años 80, en donde la industria comenzaba a formarse de manera oficial, para luego en los 90, consolidarse y llegara la era de las consolas, ahora, en los años 2020, estamos visualizando cómo es que los videojuegos te ayudan a desarrollar habilidades necesarias para el futuro.

Actualmente, estamos en una época en la que los esports están siendo cada vez más comunes, en donde los estudios independientes comienzan a ser cada vez más relevantes y de mejor calidad que los AAA. También vemos la creación de empleos que antes no existían, mismos que permiten aprender nuevas habilidades que según analistas, estas serán necesarias para el futuro.

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Antes tus papás te amenazaban con apagar tu consola si no hacías tus tareas o si no bajabas a comer, pero no todo esto es malo, pues hay estudios de diversas universidades en el mundo, como BYJU’S Future School, que aseguran que, si los videojuegos se consumen de manera adecuada, podrán desarrollar determinadas habilidades que mejorarán todos sus conocimientos.

“El acercamiento a la tecnología desde edad temprana y responsablemente, permite que los niños y los adolescentes mantengan un equilibrio entre la diversión y el desarrollo de su pensamiento creativo y lógico. Por ello, aprender programación enfocada a la creación de videojuegos, es la ventana ideal para que este balance permanezca”

Carlos Leieja, Country Manager de BYJU’s Future School
Foto: rolsocial.com

¿Cómo es esto posible? ¡A jugar más! (y programar también)

Cuando un niño o adolescente (incluso adultos), descubren que además de ser gamer, también se puede ser creador de su propio juego, comienzan a buscar opciones para resolver diversas problemáticas que son inventadas por ellos mismos, creando historias, incluso pensando en cómo sería su estilo, y demás mecánicas, lo que los vuelve más resolutivos.

Y así, en este proceso de ser más autónomos, tener confianza académica y desarrollar otras habilidades, aquí algunos ejemplos de lo que se puede lograr:

  • Diseño de procesos: para poder crear algo, se debe tener una planeación, un esquema que lleve de un inicio, derivaciones y un final, esta parte es importante, además de tener un plan de acción que irán agregando, modificando y ejecutando en todo el desarrollo del juego.
  • Creatividad: cuando cada niño o adolescente y repito, también adultos, comienzan con la construcción de sus videojuegos, comenzarán a pensar en cómo agregar todos los elementos ya planeados, desde habilidades, mentalidad y hasta cómo se vería, esto fortalece su creatividad, ya que pensar en cómo crear un personaje, es un reto completamente diferente.
  • Creadores de tecnología: todas las personas se convertirán en los padres de tecnología, más que en consumidores, pues la construcción de videojuegos les favorece en muchos sentidos, especialmente en programación y se preparan para tener un futuro más centrado en esta área, para iniciar su propia empresa o para cualquier actividad.
Foto: Freepik

El mundo de los videojuegos ha permitido tener un sinfín de creadores de contenido, desarrolladores, programadores y demás personas involucradas, pero no solo es algo que se centra en solo eso, sino que también permite aprender diferentes habilidades y aprovecharlas para diferentes situaciones, no solo en un trabajo, si no en la vida diaria.

Cada habilidad aprendida, puede funcionar para la vida diaria, un empleo, o alguna actividad a realizar, convirtiéndolos en elementos importantes para empresas o a para la propia vida, en donde tendrán una visión mucho más amplia de lo que se debe o no hacer.