El uso de los contenedores de acero que tradicionalmente llevan toneladas de mercancía de un continente a otro por el oceano ha sido variado. Existen restaurantes, bodegas y teatros callejeros que aprovechan la fuerte armazón de estas estructuras para llevar a cabo sus operaciones. La compañía inglesa, Snoozebox llegó con una innovadora idea que puede revolucionar la industria turística. Un hotel itinerante que se pueda montar en menos de dos días y que, además, cuenta con todas las comodidades de uno tradicional.

¿Alguna vez han creído que un bello escaparate natural es siempre arruinado por la vista de un lujoso hotel de Gran Turismo? Las creaciones del hombre usualmente destruyen el ambiente y devoran recursos naturales que otras especies utilizan. Un hotel hecho con contenedores de acero podría ser la solución para un turismo que se preocupa por su ambiente sin desatender las facilidades que la civilización nos ofrece.

Cada contenedor tiene cuatro habitaciones; cada una con dos camas, conexiones Wi-Fi, baño, pantalla plana, y, obviamente, instalación eléctrica y de fontanería. Otras habitaciones de lujo ocupan la mitad de un contenedor para encuentros más cómodos en medio de zonas totalmente vírgenes, para luego irse sin dejar rastro de su existencia.

Cada contenedor puede ser transportado por tren, avión o barco, por lo que su naturaleza itinerante podría expandir sus usos a zonas de desastre o a comunidades pobres que no cuenten con sistemas de agua potable o electricidad. Esta alternativa promete habitaciones económicas y cómodas.


Una solución bastante ingeniosa, ¿o no? Así se aprovechan los desechos de uno para que otros se beneficien con un uso que antes no se de daba. Esto sí es reciclar.