Airbus, la empresa europea que produce el llamado “superjumbo”, el Airbus 380, dijo este lunes pasado que podría terminar la producción del avión más grande de todos los tiempos, si uno de sus clientes más grandes, los Emiratos Arabes, no piden más aviones.
Esto fue admitido por John Leahy, el operador en jefe de a empresa, en donde dijo que Airbus se equivocó hace más de 20 años en sus apreciaciones a cómo se desarrollaría la aviación civil. Por ejemplo, en lugar de que se tengan aviones cada vez más grandes, como Airbus pensaba, lo que equivalía a menos lugares para las llegadas de los pasajeros, las empresas de aviación decidieron pedir aviones de tamaño mediano para poder volar directamente a aeropuertos regionales.
“El A380 era lo mejor que había en 1995, pero esto fue antes de que se fragmentaran las rutas”, indicó Richard Aboulafia, vicepresidente de análisis en el Teal Group Corp., una firma de consultoría en Fairfax, Va. Airbus, por su parte, dijo que aún no piensan descontinuar su gran avión, pero aceptaron que está en peligro. “Si no podemos llegar a un acuerdo con los Emiratos, pienso que no habrá otra opción más que descontinuar este programa”, dijo Leahy durante una conferencia de prensa. Pero añadió, “esperamos llegar a un trato”.
Probablemente es prematuro hacer un obituario del A380, el cual fue en algún momento considerado el futuro de la aviación, pero hoy pudiese ser un enorme descalabro y una tragedia financiera para Airbus, quien es a todo esto el mayor competidor de Boeing en el negocio de los vuelos civiles. Cuando Airbus empezó a entregar los primeros A380, hace unos 10 años, gastó algo así como 25 mil millones de dólares para desarrollarlo en su sede en Toulouse, Francia. El avión se veía como una solución a la congestión en los aeropuertos y al incremento en la demanda de vuelos. Como solamente podían aterrizar un número determinado de aviones por día en un aeropuerto, Airbus discurrió que los aviones que llevasen más pasajeros podrían hacer que los aeropuertos absorbieran más personas. Un A380 puede llevar unos 500 pasajeros y ofrece incluso cuartos en primera clase y hasta un bar.
Pero curiosamente, la industria de la aviación respondió incrementando el tráfico a aeropuertos pequeños, un cambio que favoreció a Boeing y a su línea 787 Dreamliner, un avión de tamaño mediano, que puede llevar un máximo de 330 pasajeros. El Dreamliner tiene dos motores, lo que lo hace mucho menos costoso que el Airbus 380, que tiene cuatro motores.
Aboulafia, del Grupo Teal, hizo notar que ahora es posible volar de España a Washington, sin escalas, por lo que ya no hay que pasar por Londres o Frankfurt. Esto obviamente no lo vio Airbus hace 20 años y hay que reconocer que es un escenario como pudo haber ocurrido el que esperaba la empresa. Un error de cálculo en sus expectativas para el futuro.
Hay que indicar que Airbus no tuvo un solo pedido del A380 el año pasado, comentó la compañía. De hecho, dos órdenes de dos aviones se cancelaron. El pobre desempeño del superjumbo ensombrece lo que realmente fue un año interesante para Airbus, quien dijo que entregó 718 aeronaves en el 2017, un incremento del 4% con respecto a 2016. Y la compañía dice que tiene órdenes por entregar que valen 1.1 billones de dólares.
Por otra parte, el mejor avión en ventas de Airbus fue el A320, que puede llevar unos 240 pasajeros y que tiene la mitad de tamaño que el A380 y por ende, los costos de operación disminuyen sustancialmente. Leahy dijo que los mejores días del A380 ya pasaron.. El tráfico de pasajeros se duplica cada 15 años y en ese sentido, el modelo original de Airbus sobre lo que ocurriría hoy día de alguna manera está vigente. Como sea, Airbus requiere de seis a ocho órdenes por año para mantener la producción del A380. Por el momento, los únicos clientes potenciales son lo que están en los Emiratos.