Hace unos días en una comida estaba invadido por “iPhoneros”… ya sabes, todos con diferentes modelos de iPhone (básicamente 7 y 7 Plus) hasta que salió la pregunta obligada “¿Y ahora qué teléfono traes?”. No me canso de repetir y decirles que mi trabajo es usar todos los teléfonos. No tengo “un” teléfono, de hecho, tiene años que no compro un celular, porque, afortunadamente, puedo probar los mejores modelos que me proporcionan las compañías.
Así es que sobre la mesa estaban 3 o 4 iPhones, y saqué el Galaxy S8 Plus que he estado usando las últimas semanas… “Pues éste Samsung” lo coloqué en medio de otros iPhones y el desfiguro de uno de los comensales fue instantáneo y no lo pudo ocultar “Ohhh, ¿qué es esto? Ya veo que mi iPhone está horrible”.
Y sí, ya tomándose un segundo para poder comparar así a simple vista y sin apasionamientos digitales, la verdad es que todos los teléfonos que no tienen la pantalla “borde a borde” y que todavía usan botón de “Home”, pues se ven antiguos, viejitos y con diseño anterior.
No tardó unos minutos en surgir la pregunta obligada “¿Qué hago, me cambio?”. Y siempre contesto lo mismo: si estás muy contento con el eco-sistema de Apple, quédate, no te cambies. Sigue en la zona de confort celular y espera pacientemente a que lancen el nuevo modelo iPhone 8 que seguramente ofrecerá el diseño actualizado que ahora tienen sus competidores como el S8 o el LG G6 y algunos otros.
Y respondiendo más ampliamente, ¿conviene cambiarse? Pues si tienes ganas de aprender dos o tres comandos nuevos, claro que vale la pena probar algo diferente. “Es que yo siempre he usado iPhone”, sí, está perfecto. Es un excelente producto y de hecho marcó un antes y un después en la historia de la telefonía celular, pero eso no quiere decir que no puedas probar otras opciones.
Si estamos hablando de un celular de gama alta, que ahora ronda en los 18,000 pesos, pues tal vez sea el momento de probar otra plataforma. Todo, excepto los mentados mensajes de WhatsApp migran de forma muy simple entre Android y Apple. Así es que con muy poco esfuerzo puedes pasar de una marca a otra.
Claro que siempre estarán los pequeños detalles que a ti te gustan de un modelo, pero el cambio siempre significa algún tipo de período de adaptación. Ahora bien, ¿qué tal si eres Android y quieres a toda costa probar el iPhone 8? ¡Adelante! De eso se trata. Una cosa es seguir creyendo en todos los comentarios de amigos y conocidos y, otra, es probar en SIM propio.
Falta poco, en teoría, para el lanzamiento del nuevo iPhone 8. El Note 8 de Samsung está a la vuelta de la esquina (de hecho, me invitaron a la presentación el próximo 23 de agosto). Vienen nuevos modelos de otros importantes fabricantes. Creo que, dentro de unos meses, cualquier modelo que no se “vea” espectacular como el Galaxy 8, pues estará en desventaja. Claro, hablando de celulares premium. ¿Qué te parece? ¿Qué opinas? ¿Cuándo crees que llegarán estas ventajas premium a la gama media? Espero tus comentarios.