Científicos de la Universidad de Duke, junto a otros 11 centros de investigación, han presentado el primer borrador del árbol de la vida de los 2,300 millones de especies de animales, plantas, hongos y microbios conocidas. Un recurso digital en línea gratuito, que se asemeja a una Wikipedia de los árboles evolutivos.

El árbol representa las relaciones entre los seres vivos desde el comienzo de la vida en la Tierra hace más de 3,500 millones de años hasta que se separaron evolutivamente entre sí.

«El avance consigue tapar los huecos que había en los miles de pequeños esquemas anteriores, es el primer intento real de conectar los puntos y ponerlos todos juntos», dijo Karen Cranston, de la Universidad de Duke y directora de la investigación. «Pero hay que pensar en él como en una versión 1.0».

Este nuevo esquema global de la vida se basa en 500 árboles más pequeños y en más de 7.500 estudios filogenéticos publicados en cien revistas académicas diferentes.

Comprender cómo las especies están relacionadas entre sí ayuda a descubrir nuevos fármacos, aumentar los rendimientos agrícolas y ganaderos, y traza los orígenes y la propagación de enfermedades infecciosas como el VIH, el ébola y la gripe.

«Existe una gran diferencia entre la suma de lo que los científicos saben sobre cómo se relacionan los seres vivos, y lo que está realmente disponible en formato digital, agrego.

Cabe destacar que algunas partes del árbol, como las ramas que representan a las familias de insectos y microbios, están incompletas. Eso es porque incluso el archivo en línea de secuencias genéticas más popular a partir del cual se construyeron muchos árboles evolutivo, contiene datos del ADN de menos del cinco por ciento de las decenas de millones de especies que se estima existen en la Tierra.

«Tan importante como mostrar lo que sabemos acerca de las relaciones, este primer árbol de la vida también es importante en revelar lo que no sabemos», dice el co-autor Douglas Soltis, de la Universidad de Florida.

Los datos de cada punto y el código fuente, pueden ser descargados desde Open Tree of Life, una página web de libre acceso que puede ser consultada y mejorada por cualquier investigador añadiendo nuevos datos al borrador o incluyendo especies nuevas y recién descubiertas.

«De ninguna manera está terminado», dice Cranston. «Es de vital importancia compartir los datos de los trabajos ya publicados y de los que se publiquen a partir de ahora, si queremos mejorar el árbol.»

Referencia: PNASOpen Tree of Life