Al norte de China, un hombre vendió toda la fortuna familiar para dedicarse a los juegos en línea. Muchos hemos perdido dinero, pero este hombre, cuyo apodo era Yan, malgastó una fortuna que consistía en aproximadamente 38 kilogramos de barras de oro. El problema hubiera quedado ahí, pero para explicar a su familia la desaparición de esa cantidad de dinero, el hombre decidió reportar a la policía que le habían robado.
Según la versión de Yan, le habían robado 6 millones de yuanes chinos, que equivalen a más de 12 millones de pesos en el momento de la transacción de oro, pero cuando la policía llegó a la escena del crimen, no encontró más que sus huellas digitales, por lo que se vieron en la necesidad de investigar más a fondo. Al final descubrieron, a través de las cámaras de la policía local, que la víctima había sido el mismo delincuente.
Obviamente, tuvieron que detenerlo y hablar con su familia. El dinero en realidad era de su tío, el señor Zhong, quien se lo había dejado encargado a Yan; poco después, cuando lo necesitó, se lo pidió, pero ya lo había gastado.
Yan invirtió el dinero en lo que iba a ser un kit legendario para videojuegos en línea. Al final, lo mandaron a la cárcel y espera juicio por haber robado y reportado un caso falso.
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