El príncipe Saudita Mohammed bin Salman ahora ha adquirido casi todo SNK, esto como parte de su última serie de inversiones por parte del príncipe heredero.
El príncipe saudita Mohammed bin Salman ha adquirido el 96% del aclamado desarrollador japonés SNK.
A través de su Compañía de Desarrollo de Juegos Electrónicos, el Príncipe ahora posee casi todo el desarrollador poseedor de iconicas franquicias como Fatal Fury, Metal Slug y The King of Fighters.
Electronic Gaming Development Company es una subsidiaria de la Fundación Mohammed bin Salman.
“La inversión de la Fundación Mohammed bin Salman (Fundación MiSK) en la empresa japonesa SNK refuerza su compromiso continuo con sus objetivos de empoderar a hombres y mujeres saudíes mediante la creación de asociaciones económicas, dentro de la estrategia actualizada de la Fundación para maximizar el impacto positivo en el empoderamiento de los jóvenes”
señaló un comunicado oficial de prensa cuando se propuso la inversión por primera vez el año pasado.
Curiosamente, el acuerdo se formalizó en febrero de este año, pero solo recientemente salió a la luz, lo que implica que SNK quizás no estaba interesado en publicitar ampliamente el acuerdo.
La confirmación de la inversión se descubrió como parte de las presentaciones de SNK del 15 de febrero de 2022.
La casi adquisición de SNK es solo el inicio
Esta es la última de una serie de inversiones en juegos por parte de empresas asociadas con el Príncipe Heredero. A principios de este año, Bloomberg informó que el Fondo de Inversión Pública de la nación se ha utilizado para invertir participaciones de más del 5% tanto en Capcom como en Nexon. Estas inversiones ascendieron a más de mil millones de dólares.
En diciembre de 2020, el fondo adquirió más de $3 mil millones en acciones de Activision Blizzard, Electronic Arts y Take-Two.
Está previsto que reciba una ganancia de parte de esa inversión si la adquisición de Activision Blizzard por parte de Microsoft se completa con éxito, ya que el acuerdo verá todas las acciones compradas por $ 95, mientras que a lo largo de diciembre de 2020 el precio osciló entre $ 79 y $ 91 por acción.
Según se informa, el Fondo de Inversión Pública es fundamental para el objetivo del príncipe heredero Mohammed bin Salman de hacer que la economía saudí dependa menos de los ingresos del petróleo.
