Microsoft anunció una inversión de 20,000 millones de dólares dedicados a ciberseguridad en los próximos 5 años, una cifra que cuadruplica lo que hoy invierte, mientras que Google dijo que destinará 10,000 millones de dólares a este mismo fin en ese mismo periodo de tiempo. A la par de las donaciones, Amazon dio a conocer que hará su programa de ciberseguridad disponible para entrenamiento público. 

Estos anuncios fueron dados a conocer por las tecnológicas tras reunirse con el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, este miércoles. En la reunión estuvieron los CEO’s Microsoft, Amazon, Google, IBM y Apple. 

La agenda de la reunión consiguió elevar las preocupaciones de ciberseguridad de Estados Unidos a la agenda nacional. Biden aclaró que “el gobierno federal no puede acatar el reto solo”, por lo que pidió apoyo de las tecnológicas. 

Por su parte IBM se comprometió a brindar entrenamiento de ciberseguridad a 150,000 profesionales durante los próximos tres años. 

Los reflectores sobre estos temas llegan después de que este 2021 se han registrado en Estados Unidos algunos de los ciberataques más costosos de los últimos tiempos y que más allá del impacto económico, lograron desestabilizar cadenas de suministro o servicios esenciales para el andar cotidiano del país. 

La firma de servicios empresariales digitales, Kaseya, fue atacada por el grupo REvil en julio pasado y la afectación a sus sistemas dejó fuera a más de 1,000 empresas; otro caso que levantó las alarmas fue el de la compañía de oleoductos Colonial Pipeline. 

La firma estadounidense que controla el movimiento de una buena parte del energético en Estados Unidos fue ciberatacada por el grupo Darkside y pagó un ransomware de 4.4 millones de dólares, mientras que su actividad fue detenida. Si bien de este ataque se logró recuperar 2.3 millones de dólares del rescate pagado en bitcoins, se vio como un golpe claro a los sistemas de infraestructura crítica de dicho país. 

Hacia 2025, Cybersecurity Ventures, estimó que el costo por ataques de ciberseguridad le costará al mundo 10.5 billones de dólares.