Resulta que Ómicron, la variante del coronavirus que está haciendo temblar al mundo entero, es también el motivo por el cual una criptomoneda está resurgiendo.

La moneda digital se llama: Ómicron, así es, una moneda digital que prácticamente era desconocida y por lo mismo presentaba un precio estable; sin embargo este lunes la criptomoneda alcanzó un máximo de casi 700 dólares, unas diez veces más que dos días antes, según CoinMarketCap.

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Ómicron y su golpe de suerte.

El viernes de la semana pasada, la Organización Mundial de la Salud, decidió nombrar a la variante detectada en Sudáfrica como Ómicron, esto lo ha hecho de forma alfabética (Alfa, Beta, Gamma, Delta…) y la tendencia del nombre catapultó su valor.

Sin embargo, este lunes, el valor de Ómicron retrocedió hasta los 152 dólares en las primeras horas del día, pero luego, y otra vez conforme avanzaban las noticias alrededor de la variante del coronavirus, su valor alcanzó y se estabilizó en 350 dólares.

¿Oportunismo?

En su página de internet, los fundadores de la criptomoneda Ómicron no hacen referencia a la variante. Más bien explican que esperan que su activo pueda funcionar como una moneda capaz de conservar su poder adquisitivo independientemente de la volatilidad del mercado.

No estaba del todo claro cuándo se lanzó el token Ómicron, los datos sobre su precio están disponibles a partir del 8 de noviembre mientras que un canal de Telegram con el nombre OmicDAO se lanzó un día antes.

Sin embargo, no se trata de la primera criptomoneda que gana valor a partir de un fenómeno que no está asociado en nada al dinero digital, más que con un nombre en común.

Desde el Juego de Calamar hasta el Dogecoin, las criptomonedas menores se han beneficiado este año de sus enlaces a los memes o la cultura web.