Richard Phillips Feynman (1918 – 1988) fue un físico norteamericano, Premio Nobel de la especialidad en 1965, considerado uno de los más importantes de su país en el siglo XX. Su trabajo en electrodinámica cuántica desarrolló un método para estudiar las interacciones y propiedades de las partículas subatómicas utilizando los denominados diagramas de Feynman. En su juventud participó en el desarrollo de la bomba atómica en el proyecto Manhattan.  Entre sus múltiples contribuciones a la física destacan también sus trabajos exploratorios sobre computación cuántica y los primeros desarrollos de nanotecnología.

Feynman nos sólo era un estupendo físico, sino que también lograba ser un gran maestro de la enseñanza. Escribió una serie de volúmenes llamados «Lectures on Physics» (Vols I, II, III), junto con Robert Leighton y Matthew Sands, los cuales son bilingües (en español y en inglés al mismo tiempo), Estos libros están en línea de forma legal y pueden leerse directamente con el navegador.

Pero más allá de esto, Feynman siempre fue una especie de espíritu rebelde y su goce por la vida le llevó a experimentar en el arte. Por ejemplo, una vez hizo una exposición de sus pinturas en Brasil (bajo un seudónimo, fon relativo éxito). Se burlaba de la sociedad de muchas maneras y para mentes más tradicionalistas, Feynman era una especie de excéntrico. Por ello, el haber encontrado en youtube una serie en donde el autor (o compilador, no lo sé), Reid Gower, rescata el pensamiento del famoso físico es francamente una delicia.

En los videos de esta serie, inspirados en una serie similar que hay sobre Carl Sagan, Feynman habla de la curiosidad, de la clave para hacer ciencia, de pensar como un marciano, de los honores, entre muchos temas. Dice Feynman, por ejemplo, en el video en donde habla de los honores: «estos tienen que ver con el uniforme, con la posición de quien la gente le hace caravanas. Pero este hombre tiene los mismos problemas humanos: come, cena como cualquier otro, va al baño… Es un ser humano, ¿por qué todos se inclinan? Sólo por su nombre y posición. Debido a su uniforme, no por algo en particular que él hiciera».

Sobre el Premio Nobel, a la pregunta si valió la pena, el afamado científico responde: «No lo sé. No sé nada sobre el premio Nobel. No entiendo lo que tiene que ver o el qué mereció la pena. Si la gente en la Academia Sueca decide si x, y o z gana el premio Nobel, que así sea. No tengo nada que ver con el premio Nobel. Es una molestia.  No me gustan los honores. Lo agradezco por el trabajo que hice y por las personas que lo agradecen. Sé que un montón de físicos utilizan mi trabajo… No necesito nada más. No creo que nada más tenga sentido.No veo que tenga ninguna relevancia el que alguien en la Academia Sueca decida que ese trabajo sea lo suficientemente bueno para recibir un premio. Yo ya tengo el premio: el premio es el placer de descubrir algo».

Las reflexiones de Feynman de pronto me han puesto a pensar que en el fondo hemos caído en la trampa cotidiana, en el usos y costumbres que nos hacen pensar y creer cosas que en realidad no tienen sentido. Desde luego que ganar un Nobel no es poca cosa, pero el hecho de que un científico de la talla de Feynman nos advierta que el premio es el placer de descubrir algo minimiza todo lo anterior.

Creo que Feynman no es tan conocido como Sagan, pero sin duda fue un personaje en todos los sentidos. Vale la pena ver este canal. No tengo dudas al respecto.

Referencias:

The Feynman Series
Richard Feynman (Wikipedia)