Microsoft prometió que la semana pasada lanzaría una actualización para Xbox One, pero por razones desconocidas, ésta se retrasó. Ahora, la mayoría de los sistemas deberían haber recibido el software, que si bien no tiene tantos cambios “notables”, sí mejorará el desempeño general de la plataforma.
De acuerdo con Major Nelson, miembro del equipo de Xbox en Microsoft, la actualización se liberó durante el fin de semana y los dispositivos que tengan activado el modo “Instant On” verán la notificación del software nuevo que se instalará automáticamente mientras la consola esté apagada y en un horario donde no suela utilizarse.
Una vez aplicada, los usuarios de Xbox One podrán ver el nivel de carga de sus controles directamente en la pantalla de la TV, además de tener la alternativa de conectar un teclado USB a la consola o poder averiguar exactamente la forma como se utiliza el espacio de almacenamiento en el disco interno, así como administrar las apps instaladas.
Adicionalmente, la actualización permite borrar información de juego y de apps; tiene interfaz mejorada en la administración de amigos, mensajes y chats; incluye listas de espera separadas cuando se instalan apps o juegos y mejoras en el reproductor de Blu-ray, entre otras.
Finalmente, la actualización también tiene ajustes para el mando remoto con los que se podrá jugar mejor Titanfall, cuya versión beta fue liberada hace unas horas y causó revuelo entre los seguidores de los FPS.
Si la actualización de Xbox One no se ha aplicado aún, no deberá pasar mucho tiempo para que la notificación al respecto aparezca en el sistema.
Referencia: Major Nelson