Hoy ha sido una gran semana para la industria de los videojuegos, pues el pasado lunes Microsoft anunció las especificaciones oficiales de la Xbox Series X, y el día de hoy Sony ha hecho lo mismo con la PS5, aunque todavía está pendiente conocer oficialmente el diseño de la consola.

Pero pasemos a lo que encontraremos en el interior de ambas consolas, que serán las consolas más poderosas de cada compañía en su historia, y que su poder ya se puede empezar a comparar con el de varias PC Gaming del mercado.

Ficha técnica Xbox Series X y PS5

  Xbox Series X PS5
CPU AMD Zen 2 personalizada de 8 núcleos a 3.6 GHz AMD Zen 2 personalizada de 8 núcleos a 3,5 GHz
GPU RDNA 2 GPU personalizada a 12 TFLOPS RDNA 2 personalizada a 10.28 TFLOPS
SSD 1 TB SSD NVME 825 GB SSD NVME
RAM 16 GB GDDR6 16 GB GDDR6
Unidad óptica Blu Ray 4K UHD Blu Ray 4K UHD
Rendimiento gráfico 4K a 60 fps y hasta 120 fps  

Reescalado de juegos a 8K
4K a 60 fps y hasta 120 fps  

Reescalado de juegos a 8K
Ray Tracing

La Xbox Series X supera en números a la PS5

En números la nueva consola de Microsoft es superior a la de Sony, esto a pesar de que ambas usan la misma CPU y GPU, sin embargo, ambas han sido personalizadas por cada una de las compañías para obtener un mejor rendimiento con base en sus demás capacidades de hardware y software.

Sin embargo, dudo mucho que la diferencia entre la PS5 y Xbox Series X se note en el día a día con la experiencia de juego, pues la diferencia tampoco es tan grande como para eso te haga decidir entre una y otra.

El gran secreto y buena noticia es que Sony también incluirá una SSD NVME en el interior de la consola, es casi el mismo almacenamiento que integrará la Xbox Series X, y ayudará bastante a reducir los tiempos de carga.

En este caso Xbox ya anunció que juegos como Stay of Decay 2 se ejecutarán 40 segundo más rápidos en comparación con la Xbox One X, mientras que en el caso de Sony, el juego de Spiderman logró ejecutarse en apenas 1 segundo, cuando el la PS4 Pro tarda aproximadamente 8 segundos.

Ambas consolas tendrán la posibilidad de incrementar el almacenamiento con unidades SSD, así que no habrá mucho problema para aquellos usuarios que quieran expandir el almacenamiento.

Por lo demás tenemos básicamente lo mismo, es decir, juegos a 4K a 60fps con la posibilidad de ejecutarse a 120 fps, y también reescalado a 8K, aunque aquí dependerá también de nuestra pantalla para poder disfrutar de esta resolución.

Y por último, pero no menos importante tenemos el Ray Tracing, la función prometida para ambas consolas que mejorará la textura e iluminación de los juegos para volverlos más realistas y aprovechar mejor su potencia gráfica.

¿Cuál es mejor?

Eso dependerá de cada usuario, cada marca tiene una estrategia muy distinta, y siendo honestos no creo que las diferencias de hardware tengan un peso específico en la decisión de una u otra consola, así que aquí dependerá más de los juegos, servicios y promociones que ofrecerá cada marca para convencer a los usuarios de comprar sus consolas de siguiente generación.