En un panorama en el que los juegos mainstream, sean buenos o no, regularmente se mueven por las propuestas de siempre, los títulos indie son aquellos que suelen ofrecer experiencias que se salen de las áreas comunes.

Para que esa noción siga vigente en este período de transición a la nueva generación de consolas llega The Pathless, una aventura en tercera persona desarrollada por Giant Squid y publicada por Annapurna, un nombre que a los cinéfilos les resultará conocido, pues se trata de una productora independiente que desde 2012 ha estado ligada al cofinanciamiento de obras fílmicas del calibre de Her, The Master y Phantom Thread.

En The Pathless una isla antigua ubicada al borde del mundo ha sido invadida por una entidad siniestra que ha esparcido la oscuridad y que pretende deshacer la existencia como la conocemos.

Muchos se han aventurado sin éxito a la isla para detener a la entidad, pero ahora es el turno de la última Cazadora, una arquera que se verá auxiliada de un águila sagrada en su camino para frenar la oscuridad, y quien deberá liberar a antiguos dioses que han sido corrompidos para liberar poco a poco cada región de la isla de las garras de la oscuridad.

Tal como sucede con las películas producidas por Annapurna -en las que hay elementos que la generalidad del público pueda identificar, como repartos de prestigio en propuestas de autor que no atienden a la lógica del blockbuster hollywoodense-, The Pathless es un título en tercera persona que se desarrolla en un enorme bosque en el que cada sección cuenta con un jefe a derrotar.

Hasta ahí todo resulta familiar, pero desde su arranque el juego se distingue, más allá de su estilo visual, por sus mecánicas y por su empeño en reducir a su elemento más básico el significado de una experiencia de juego.

Hablar de una aventura en tercera persona que se desarrolla en un enorme bosque invita a pensar en que The Pathless es un juego en el que abundan comandos, movimientos, poderes, ítems y especiales, pero sorprende que aquí la jugabilidad se fundamenta es un esquema de control simplista.

Trasladarse con fluidez en The Pathless implica presionar R2 para disparar flechas a los talismanes que están regados a lo largo del mundo, y presionar L2 para correr rápido gracias a la barra que se llena en razón de cada talismán destruido.

El punto es tratar que la fluidez de movimiento sea ininterrumpida y por eso mientras se corre habrá que prestar atención a los talismanes que estén a la redonda para dispararles y mantener la barra lo más llena posible, lo que hace que L2 y R2 sean el principal maridaje de este esquema de control.

Asimismo, Equis sirve para saltar y -una vez que el águila se ha unido a la aventura- para planear por el aire y aletear, lo que sirve para alcanzar lugares altos de difícil acceso.

Círculo es un botón de interacción general y Triángulo sirve para activar la Visión Espiritual, una acción que se vuelve fundamental en la aventura, ya que ayuda a ver aquello que yace escondido a la vista y para brindar un sentido de qué es lo que se necesita hacer en el mundo para proseguir.

Como dijimos, la experiencia de juego en The Pathless es reducida a su elemento más básico, tanto así que aquí no hay ninguna suerte de mapa ni indicaciones, lo único que sabemos es que es necesario desterrar a la oscuridad y liberar a los dioses de la corrupción. De ahí la necesidad de activar la Visión Espiritual, pues resalta en rojo las áreas que requieren de llaves para continuar con la aventura.

Esto nos lleva a hablar de los puzzles, otra de las mecánicas centrales de The Pathless, ya que la obtención de dichas llaves conlleva por lo general la resolución de algún rompecabezas para el que se necesita usar flechas o apoyarse del águila, quien puede trasladar bloques que deben ser colocados en switches.

Un aspecto que llama la atención es que el juego no se basa en matar adversarios, en lo que a todas luces es una invitación a observar la existencia desde una perspectiva primigenia y natural en la que los animales no solo son los guardianes del orden del mundo, sino también los dioses creadores de la vida.

Acerca del apartado técnico, The Pathless no presume un despliegue gráfico como el que se ve en las superproducciones de developers multimillonarios, y apuesta -como suele verse en la arena indie- por un diseño de arte que no atiende al realismo, por una paleta de colores basada en acentos, y por efectos visuales y de luz llamativos y estilizados que sorprenden cuando menos se les espera.

La versión que probamos fue la de PlayStation 5 y es necesario señalar que cuenta con dos modalidades gráficas: Resolución y Rendimiento. La primera mejora la calidad visual pero corre a 30 FPS, mientras que la segunda corre a 60 FPS pero reduce la calidad visual.

Acerca del diseño de audio y banda sonora, debe apuntarse que el primero se mantiene sobrio y sin tomar riesgos, mientras que la segunda es capaz de tocar fibras sensibles a pesar de que el involucramiento con la protagonista en realidad sea mínimo, lo que vuelve a demostrar que la música de un videojuego puede impactar directamente en las emociones sin que sea necesario un contexto desarrollado a detalle.

Y sobre los aspectos negativos, la propuesta general de The Pathless es interesante y entretenida y hasta cierto grado innovadora dentro de su afán de regresar a los básicos, pero en ocasiones puede antojarse reiterativa y con una ligera falta de dinamismo -a pesar de que irónicamente sea necesario disparar flechas en todo momento para moverse con rapidez.

The Pathless es un disfrutable indie de tiempos de transición, un juego que es exactamente lo que se esperaría de un producto que lleva la firma de Annapurna en su distribución.

Es un título de visuales sencillos que recuerdan a los de Mulaka, pero que cuando explotan son capaces de evocar los de The Legend of Zelda: Breath of the Wild. Y es un juego que instalándose en lo básico logra contagiar un sentido de emotividad gracias a su música y al rol que juegan los animales en su mundo.

8.5/10
The Pathless
Año: 2020
Developer: Giant Squid
Publisher: Annapurna Interactive
Versión revisada: PlayStation 5
También disponible: PlayStation 4, PC y iOS