Un joven en particular llamó la atención de entre decenas de miles de aficionados que abarrotaron el St James Park para presenciar el duelo entre el Arsenal y Newcastle de la Premier League el domingo. ¿Por qué alguien llevaría al estadio un control de Xbox?
No faltó quien captara la escena con su teléfono y lo subiera a Twitter, haciendo del tipo que pretendía controlar a jugadores reales desde las gradas todo un tema de conversación en redes sociales.
Resulta que Andre Marriner no es un gamer obsesionado. Lo que este joven hacía era recopilar información junto con otras tres personas y seis cámaras HD colocadas en el estadio por parte de Chyron Hego, empresa que se dedica a la creación de gráficos para transmisiones de TV, entre otros servicios. Los datos recopilados son compartidos con la propia Premier League y con Opta, quienes a su vez codifican esta información para el análisis tácticos y obtención de estadísticas especializadas.
Marriner llebava su control de Xbox para medir aspectos como la distancia a la que normalmente se encuentra el árbitro de los jugadores, dónde se ubican los futbolistas y, sobre todo, cómo se comportan cuando no están involucrados en una jugada.
De acuerdo con David Eccles, presidente de Chyron Hego, se puede encontrar personal de la compañía realizando estas labores en cada partido de la Premier League, pero prefieren pasar desapercibidos por razones obvias.