Nos encontrábamos surfeando en la web, minding our own business, cuando de pronto se nos atravesó esta vieja nota del periódico Reforma:

Como puedes verlo, fue publicada el 10 de enero de 2007, un día después de que Steve Jobs presentara iPhone al mundo.

Por supuesto llama la atención que el periódico optara por calificar al iPhone como el hijo del iPod.

‘¿Qué obtiene si combina un iPod con un teléfono celular? El iPhone. Se trata de un teléfono con pantalla sensible al tacto, que es capaz de almacenar y reproducir música y video, se lee en el adelanto.

Por supuesto son palabras en sintonía con la época, pues nadie se imaginaba la manera en que Apple revolucionaría la industria de los teléfonos móviles.

Imagen: Time

Ante los ojos de enero de 2007, por supuesto parecía que iPhone solo sería un iPod con teléfono integrado, pero encontrándonos a tantos años de distancia, y viendo el panorama en retrospectiva, es imposible negar que Apple -se sea o no entusiasta de la marca- es la responsable de estandarizar el concepto del smartphone como lo conocemos.

Dice la leyenda que para el desarrollo de iPhone Jobs tuvo en mente tecnologías innovadoras de Apple que nunca terminaron de impactar en el público consumidor, como los dispositivos Apple Newton.

Su idea era que los usuarios pudieran interactuar con una computadora presionando su pantalla directamente para escribir.

Cuando revisó el prototipo de los ingenieros, vio el potencial de desarrollar el dispositivo como un teléfono móvil. El resto es historia.

iPhone es uno de los pilares económicos de Apple y es en gran parte responsable de que la compañía sea una de las más valiosas del mundo.

Además, es la compañía de tecnología más grande a nivel internacional.

En agosto de 2020 se convirtió en la primera compañía estadounidense en llegar a la marca de los dos billones de dólares de valor en bolsa.