Amazon, que empezara como una tienda virtual de libro,s es ahora un gigante que vende de todo. Además de libros hay ropa, dispositivos electrónicos, computadoras, tablets, reproductores de música, cámaras digitales, etcétera. Considerando esto y si vives en los Estados Unidos, si has comprado en los últimos quince años un CD, puede reclamar la versión mp3 de ese disco vía el Amazon Cloud Player, gracias al sistema AutoRip.

Muchos compradores de CD pasan a mp3 los discos que compran, para escucharlos en sus reproductores mp3. Lo hacen porque esto es más cómodo que andar cargando con los discos compactos y además, para proteger su inversión sacando una copia digital de lo que han comprado. Desde luego las compañías disqueras no son las más felices con eso, pero no pueden evitar que las personas saquen copias de los discos compactos, ya sea para hacer copias de respaldo o con propósitos menos nobles.

Sin embargo, parece ser que ha llegado el momento de reconocer a los consumidores el derecho de tener una versión digital de la música que han comprado. Amazon parece haber tomado la estafeta y a través de algo que han llamado AutoRip, el cual es en esencia una oferta del gigante librero: si en los últimos 15 años has comprado un CD de música y además, resides en los Estados Unidos, podrás obtener sin ningún cargo adicional una versión digital, que será cargada automáticamente al Amazon Cloud Player. La música estará en formato mp3 (256 kbits de resolución), y en estos momentos hay más de 50 mil álbumes disponibles. Como si eso fuera poco, cualquier disco compatible con AutoRip (que hayas comprado o consideres comprar a partir de ahora) no influye en el espacio que Amazon entrega en cada cuenta del Cloud Player.

AutoRip funciona solamente para los Estados Unidos pero es claro que eventualmente estará disponible en muchos más países. Poco a poco, y aunque la industria del disco se rasgue las vestiduras, los archivos digitales mp3 finalmente tendrán un destino menos complejo que todas las protecciones digitales que le han querido imponer. Y vayan pensando que los libros electrónicos, los e-books, podrían correr con una suerte similar en el futuro próximo.

Referencias:

BBC