La «encuesta de la energía oscura» (Dark Energy Survey – DES) busca usar los patrones de la estructura cósmica como se ven estos en la distribución espacial de cientos de millones de galaxias, para así revelar la naturaleza de la misteriosa energía oscura, la cual es la responsable de la aceleración cósmica.

El estudio empezó en el 2013, en donde DES mapeó más del 10% del cielo con una cámara digital, la cual contenía 570 millones de pixeles y cinco filtros ópticos que le daban a la galaxias sus colores, estimando así su corrimiento al rojo, incluso. Los astrónomos del observatorio mencionado son parte de un equipo de unos 400 científicos, en siete países, que trabajan con el DES y en donde, el último año, liberaron el primer conjunto de datos.

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El vacío cósmico ocupa la mayor parte del volumen del universo. Contrario a los clústers de galaxias y otras estructuras densas, las cuales son fuertemente afectadas por los efectos gravitacionales, sin dejar pasar los procesos asociados con la formación de las galaxias, estos vacíos son las regiones menos densas del universo y tienen una dinámica relativamente simple. Esto los hace ser como sondas particularmente sencillas para restringir parámetros cosmológicos.

El astrónomo David James, miembro del equipo de colaboración de DES y uno de los co-autores del nuevo artículo, analiza el primer bloque de datos disponible, con la intención de describir las relaciones entre la masa y la luz alrededor de los vacíos cósmicos. El científico usa un modelo estadístico para analizar la distribución en 2D de las galaxias, así como la distribución en 3D, la última obtenida de calcular las distancias entre galaxias a partir de sus corrimientos al rojo determinados fotométricamente.

Los investigadores hallaron dos métodos que concuerdan muy bien uno con el otro, con modelos en donde la física de los entornos de vacío es muy simple y en donde la cantidad de luz emitida escala de forma directa con la masa. Los vacíos con diámetros entre cien y seiscientos millones de años luz, concuerdan muy bien con las pruebas realizadas y la la razón entre la masa y la luz es mejor que el 10%. Futuras observaciones y mejoras estadísticas podrían dar más consistencia a las pruebas de la gravedad, la relatividad general y a los escenarios de la materia oscura.