En el 2021, un pequeño helicóptero marciano será el primer vehículo en la historia que buscará probar la viabilidad de vehículos más pesados que el aire en la superficie del planeta rojo. De hecho, tenemos noticias de este proyecto en el cual incluso una alumna de la Facultad de Ciencias de la UNAM participó.

«Nadie antes ha construido un helicóptero para poder volar en Marte, por lo que estamos entrando todos los días en territorio nuevo», dice MiMi Aung, administradora del proyecto del helicóptero de Marte en el Jet Propulsion Laboratory, de Pasadena California. «Nuestro prototipo volador -el modelo que viajará a Marte- ha pasado ya pruebas importantes», indicó Aung.

En enero del 2019, el equipo operó el helicóptero en un entorno marciano simulado. Entonces el helicóptero se llevó a las instalaciones de Lockheed Martin Space, en Denver, para las pruebas de compatibilidad con el sistema del helicóptero el cual pesará, ya se sabe, unos 1.8 kgs. y se pondrá en medio del carrito robótico Mars 2020 durante en lanzamiento y el viaje interplanetario hacia Marte.

El helicóptero marciano no tiene instrumentos científicos. Su propósito es confirmar la posibilidad de volar en la tenue atmósfera marciana (que es el 1% de la densidad de la Tierra) y que, eventualmente, pudiese ser controlado desde la Tierra a pesar de las distancias interplanetarias, en donde el transmitir una señal a Marte puede llevar una media hora. Sin embargo, el helicóptero tiene una cámara que puede dar imágenes de alta resolución en sus vuelos.

Las futuras misiones a Marte podrían llevar la segunda generación de estos helicópteros y así añadir una dimensión aérea a las exploraciones. Podría entonces investigarse lugares de difícil acceso o no visitados antes, como pendientes, por ejemplo. Pero para esto, primero debe demostrarse que es posible volar en el ambiente marciano.

En Denver, el helicóptero se está verificando para asegurarse que sus mecanismos no puedan fallar y que ante la imposible de evitar vibración en el lanzamiento y en las operaciones de vuelo, todo funcione sin dificultades. Puede verse que en la NASA están pensando en todo, aunque siempre hay la posibilidad de estar omitiendo algo. Esto normalmente se sabe en el momento que el dispositivo ya está funcionando en a superficie marciana.

El 11 de mayo regresó al JPL el helicóptero para hacer más pruebas y afinar los detalles. Por ejemplo, se pondrá un nuevo panel solar que le dará energía al helicóptero. Igualmente, se tienen que checar unas 1500 piezas de fibra de carbón, aluminio, silicon, etcétera, las cuales forman parte de toda la estructura de la nueva nave aérea para Marte. Y finalmente, tendrán que realizarse más pruebas.

«Esperamos completar las últimas pruebas del helicóptero este verano«, dijo Aung, «pero nunca sabremos si el helicóptero podrá volar hasta que éste se encuentre en Marte». El Mars 2020, junto con este pequeño helicóptero, se lanzarán de Cabo Cañaveral, en Florida, en julio del 2020. Deberá llegar al cráter Jezero el 18 de febrero del 2021. Cabe decir que esta nave será la primera en la historia que tendrá la capacidad de redefinir su objetivo del aterrizaje cuando se realice la secuencia correspondiente.

El Mars 2020 llevará tareas de investigación geológica para determinar la viabilidad de ser accesible a la vida humana de alguna manera. Igualmente buscará vida en el planeta rojo y tratará de evaluar los recursos naturales con los que cuenta el planeta. También la Mars 2020 tendrá una serie de envases sellados, los cuales se llenarán con muestras que eventualmente otra misión recogerá para regresarlos a la Tierra.