Es claro que la matemáticas están en todo. Parte de la razón es que es una ciencia libre de contexto, es decir, se puede estudiar por sí misma sin tenerle que asignar un entorno en donde actúe. Y por supuesto, si se trata de arte, hay muchísimas expresiones que pueden ser analizadas desde el ojo matemático. Para poner un ejemplo, Escher es uno de los exponentes más notables de arte matemático.

Ahora, la Sociedad Americana de Matemáticas, ha hecho una exhibición de arte matemático, en donde se muestran más de 50 piezas, las cuales son -algunas- impresionantes. La exhibición se presenta en Baltimore, MD, Estados Unidos, en donde hay un premio, por ejemplo, «para el trabajo más estético en el que se combine matemáticas y arte», y aunque es claro que esto puede darse a polémicas, evidentemente el hecho es que los autores de estas obras incluyen de alguna manera un modelo que, efectivamente, depende en mucho de las matemáticas.

Para decirlo de otra manera, esta exhibición tiene mucho de ciencia y arte al mismo tiempo, y demuestra al final del día la belleza de las matemáticas de una forma visual que quizás antes nadie había podido mostrar.

Pero veamos algunas obras:

Doug Dunham presenta esta imagen, impresa en aluminio (30 x 30 cms). Se trata de un patrón hiperbólico inspirado en el dibujo de la división regular número 42 de Escher. Hay 5 rotaciones obvias de los centros en el punto de reunión. Esta técnica, descrita pro Escher, indica que hay dos tipos de rotaciones que se pueden doblar de cuatro maneras diferentes. Sin duda un estupendo trabajo.

Gary Greenfield presenta una impresión digital de 23 x 15 cms. Después de colocar un número finito de fichas en cada vértice de una gráfica finita, un chip dispara el autómata celular que se define bajo la regla de iteracción en donde cada vértice tiene al menos tantos vecinos como sus vecinos distribuyen una ficha en cada uno de ellos. Cuando la gráfica es un ciclo con treinta vértices, e inicialmente, un vértice tiene a lo más tres fichas, se tiene una fase periódica de uno, dos o treinta. ¿Por qué? Tema para estudiarse con matemáticas.

Tenemos, por ejemplo, una botella de Klein, creada por Elizabeth Paley, que fue la ganadora a la mejor escultura y que muestra claramente un emblemático objeto matemático.

Muchas de las obras pueden verse en este sitio. Hay cosas formidables.