En un movimiento sorpresivo, este 21 de septiembre amanecimos con la noticia de que Microsoft adquirió a ZeniMax Media, la compañía dueña de franquicias como The Elder Scrolls, DOOM, Fallout, Wolfenstein y Quake.

El anuncio lo hizo Phil Spencer, cabeza de Xbox, a través de una entrada publicada en el sitio oficial de noticias de la plataforma, en donde dijo que la compra incluye Bethesda Softworks, Bethesda Game Studios, id Software, ZeniMax Online Studios, Arkane, MachineGames, Tango Gameworks, Alpha Dog y Roundhouse Studios.

En pocas palabras, estamos hablando de los estudios que en la actualidad hacen posibles The Elder Scrolls, Fallout, Wolfenstein, DOOM, Dishonored, Prey, Quake, Starfield y muchas otras franquicias más.

‘Los juegos de Bethesda siempre han tenido un lugar especial en Xbox y en el corazón de millones de jugadores a lo largo del mundo’, escribió Spencer, quien aprovechó para recordar la relación que Microsoft ha tenido con las compañías que están bajo el velo de Bethesda, desde los días del original DOOM y el motor gráfico id Tech, hasta cuando fue posible llevar The Elder Scrolls III: Morrowind al primer Xbox.

También recordó que Bethesda fue una de las primeras compañías que apoyó Game Pass y que actualmente está invirtiendo en nuevas tecnologías como el juego a través de la nube, algo fundamental en la actual estrategia de Microsoft en la que una parte de sus ecosistema descansa en xCloud.

‘En las últimas semanas, hemos estado emocionados por comunicarles más detalles de un plan que se ha elaborado durante años. Un plan que incluye prometerles a ustedes, jugadores de Xbox, que tendrán las experiencias de gaming de próxima generación más inmersivas, compatibles y de mejor rendimiento, y que tendrán la libertad de jugar títulos blockbuster con sus amigos en donde quieran, cuando sea’ apunta Spencer.

Al final del texto, remarcó que este es un día histórico por todo lo que implica para Xbox.