LG hizo oficial el cierre de su división móvil, por lo que no habrá más lanzamientos de la marca en 2021 ni en un futuro próximo, a no ser que de pronto algún fabricante chino busque comprar la licencia al fabricante surcoreano para revivir alguna de sus icónicas series.

La firma llevaba años perdiendo dinero con su división móvil, y cada anualidad la competencia era mucho más grande y feroz, sobre todo en lo que respecta a fabricantes chinos.

Pero si algo demostró LG a lo largo de los años es que no tenía miedo a la innovación, y en más de una ocasión lanzó teléfonos que parecían adelantados a su tiempo, aunque al final muchos usuarios prefirieran un teléfono más común que apostar por un modelo con innovaciones que probablemente no iban a utilizar lo suficiente.

Estos son los teléfonos más extraños e innovadores en la historia de LG:

Crystal

Lanzado en el 2009 este teléfono no solo era estéticamente impresionante, sino también innovador. Haciendo honor a su nombre, el Crystal tenía un teclado transparente al que la firma denominó Crystal Touchpad, y que además era un panel táctil.

Este no era ningún tipo de smartphone, pues en ese año Android acababa de hacer su debut y muy pocos fabricantes habían empezado a mirar el sistema operativo de Google. Sin embargo, desde ese momento LG ya estaba atrayendo miradas por ser una firma innovadora en el negocio de la telefonía móvil.

DoublePlay

En 2011 Android ya era el sistema operativo necesario para cualquier fabricante que tuviera la intención de competir contra Apple y hacerse de un hueco en el mercado de smartphones. El DoublePlay no era el primer smartphone de LG con el sistema operativo de Google, pero sí fue uno de los más interesantes por incluir características diferenciadoras en su dispositivo.

Su diseño no era exclusivo, pues ya había teléfonos que se deslizaban para sacar de interior un teclado físico, sin embargo, lo que llamó mucho la atención fue su doble pantalla con la que el usuario podía usar la exterior -que eram más grande- para visualizar algún contenido, mientras que la interior servía mucho más a la hora de mandar mensajes.

Optimus 3D

Conocido en casi todos los mercados del mundo como LG Optimus 3D, fue un teléfono que se lanzó al mercado el 7 de julio de 2011 con Android 2.2 Froyo, y cuyo mayor atractivo era la pantalla, pues fue el primer teléfono del mundo con una pantalla 3D que se podía disfrutar sin lentes con esta tecnología.

El problema es que, a pesar de que la pantalla era muy atractiva, la fatiga visual se hacía presente a las pocas horas de usar el teléfono, por lo que no muchos usuarios estaban dispuestos a gastar los 11,000 pesos a los que se puso a la venta en su momento, un precio bastante alto para un teléfono en el año 2011.

LG intentó convencer a los usuarios con detalles interesantes como la posibilidad de capturar fotografías en 3D.

La marca no lanzó una segunda versión de este modelo

LG Optimus G2

Este dispositivo dejó de lado las innovaciones arriesgadas que vimos con el Optimus 3D o que llegarían con el G Flex; sin embargo, LG no quería seguir los tradicionales diseños de sus competidores, y el G2 fue un teléfono que tenía los botones de volumen y encendido/apagado en la parte trasera, justo debajo de la cámara.

Poner los botones ahí hacía mucho más cómodo utilizar el dispositivo para algunas tareas, y era el diferenciador en comparación con equipos que ya empezaban a tener ventas espectaculares como el Samsung Galaxy S4.

LG G Flex

Aunque no lo creas, en 2013 LG era una de las firmas que destacaba por la innovación, y el LG Flex fue básicamente el precursor de lo que hoy son los teléfonos con pantalla flexible.

Aunque su nombre hace referencia a la palabra flexible, la realidad es que este teléfono no se doblaba, pero su pantalla sí tenía una ligera curvatura al estilo de un plátano.

La razón de esta pantalla era para hacer el teléfono mucho más ergonómico y con un enfoque en mejorar la experiencia al jugar tal y como lo hacen hoy en día los monitores curvos.

Pero si había algo que llamaba notablemente la atención es que el cuerpo de este teléfono tenía una tecnología que permitía autoreparar la carcasa de algunos rasguños con tan solo aplicar un poco de calor.

LG Nexus 5

Aunque este teléfono era de diseño más tradicional y no presumió ningún tipo de innovación para diferenciarse de la competencia, el Nexus 5 marcó un antes y un después en la historia de Android, y para muchos es el mejor Nexus de toda la historia.

¿Por qué marcó un antes y un después? Porque rompió el mercado gracias a su precio, y aunque no fue el primer Nexus de LG, llevó la experiencia de Android puro a las masas y demostró que este tipo de teléfonos no tenía por qué ser exclusivo de los desarrolladores.

El Nexus 5 fue lanzado en 2013, y probablemente fue el equipo que motivó a Google a lanzarse como fabricante de teléfonos, pues tres años después Google dejó de hacer los Nexus para lanzar su primer Pixel al mercado.

LG V10

En 2015 la competencia comenzaba a ser feroz para LG, pues enfrente tenía al Galaxy S6 Edge, el primer teléfono de Samsung con pantalla curva en los bordes que era bastante atractivo e innovador.

Para contrarrestar la jugada de sus rivales, LG lanzó el V10, que incluía una segunda pantalla por software, pues la parte superior se reservaba para incluir accesos directos a las aplicaciones favoritas de cada usuario, lo que la hacía útil para trabajar con la multitarea.

Otra de sus grandes novedades fue su cuerpo fabricado con acero inoxidable en combinación con silicona que fue bautizado como DuraSkin, lo que incluso llevó a denominarlo como uno de los teléfonos más resistentes de aquella época.

LG G5

Un año después del V10 la firma surcoreana lanzó el G5, un teléfono que volvió a apostar por un elemento que lo hiciera totalmente distintos a sus competidores. El G5 fue el primer teléfono modular del mercado, por lo que podían mejorarse ciertas características instalando cada uno de los módulos que el fabricante puso a la venta por separado.

Por ejemplo, era posible mejorar el control de la cámara u obtener sonido HiFi en el teléfono con estos módulos. El problema fue que quitarlos y ponerlos no era nada cómodo porque obligaba al usuario a apagar el equipo y retirar el módulo para poner uno nuevo.

Por otro lado, los módulos eran bastante caros considerando que el LG G5 ya era un dispositivo con un precio alto que competía contra lo mejor del mercado en 2016.

En 2017 LG abandonó el sistema de módulos con el G6.

LG Wing

El último teléfono de esta lista es el LG Wing que se lanzó en 2020 y que nuevamente hizo gala de la innovación y la búsqueda de diferenciarse de sus competidores, pues presume pantalla giratoria que busca enfocarse en la multitarea y en la posibilidad de trabajar siempre con dos aplicaciones al mismo tiempo.

La idea de LG es que esta pantalla giratoria dote de un sentido práctico a cada usuario, desde el que busca usar el teléfono como centro multimedia, hasta el que necesita llevar su oficina en el bolsillo.

El problema es que este teléfono (como muchos otros de la lista) va por un camino de innovación distinto al que usa el resto de la industria, razón por la que probablemente las ventas de la división móvil de la compañía no fueron las esperadas desde hace varios años.