En las últimas semanas parece que la situación entre Huawei y Estados Unidos se ha relajado, sin embargo, la empresa china sigue estando dentro de la Entity List, por lo que en cualquier momento Estados Unidos podría establecer algunas limitantes en lo que respecta a su relación con las empresas norteamericanas.
Sin embargo, algunos miembros del Congreso de los Estados Unidos no quieren que Trump quite el veto a Huawei, incluso quieren que las restricciones sean mucho más severas, y para ello han registrado un proyecto de ley para limitar las capacidades de Trump en este tema y que el veto se haga efectivo el próximo 19 de agosto.
Según menciona The Verge, el proyecto de ley es conocido como «Defending America’s 5G Future», donde se busca que el Congreso sea la única entidad que pueda decidir sobre el futuro de las relaciones entre Estados Unidos y Huawei.
“Huawei es una compañía malvada”
Entre los congresistas que buscan esta ley están Marco Rubio y Mitt Rommney, mismos que han atacado fuertemente a Huawei, pues Marco Rubio ha mencionado lo siguiente:
«Huawei es una malvada compañía de telecomunicaciones china dirigida por el Estado que busca dominar el futuro de las redes 5G. Es un instrumento de poder nacional utilizado por el régimen en Beijing para socavar a las empresas estadounidenses y otros competidores internacionales, participar en espionaje en países extranjeros y robar propiedad intelectual y secretos comerciales».
Las palabras del congresista dejan claro que con esta iniciativa buscan ser más severos con las relaciones entre Huawei y las empresas norteamericanas.
Y es que otro de los congresistas que apoyan esta iniciativa mencionó que las compañías estadounidenses no deberían dedicarse a vender a “sus enemigos” las herramientas que usarán para espiar a los estadounidenses. Incluso en varias ocasiones se refieren a Huawei como un apéndice del Partido Comunista Chino.
El hecho de que se haya registrado el proyecto de ley no significa que las cosas para Huawei van a empeorar, pero es un hecho que la compañía podría enfrentar serias complicaciones en un futuro si se llega a aprobar el proyecto, aunque eso también significaría que algunas empresas norteamericanas saldrían afectadas.
