Hace tres años se lanzó la primera Raspberry Pi y a la fecha hemos visto que el desarrollo de la tarjeta y las aplicaciones de la misma va creciendo considerablemente. Hay todo género de dispositivos con una Pi como corazón del sistema y ahora, con la Pi 2, probablemente hallemos pronto nuevos usos y proyectos para tan original computadora de bajo costo. Sin embargo, el cuello de botella parece ser la energía. Se necesita tener conectada la PI para que esta funcione. Las baterías son la opción, pero… ¿cuánto tiempo de vida nos pueden dar para esta tarjeta?

PiJuice parece ser una interesante solución pues es un sistema de baterías que le puede dar autonomía y ciertamente hacer de la Pi más portátil. El sistema es muy simple: da 1400 mAh a través de sus baterías intercambiabes de litio-ion, compatibles con un HAT para la Pi. Un Hat es esimplemente una tarjeta que se pone sobre la Pi, conectándola a ésta. Es el equivalente a un shield en la tecnología Arduino, por ejemplo. PiJuice usa solamente 5 pines de GPIO de la tarjeta, dejando los demás para conectar otras cosas.

El PiJuice está diseñado de manera que cuando está conectado, se cargan las baterías. Es de hecho el mismo esquema que se usa en las computadoras laptop, por ejemplo. El dispositivo PiJuice tiene un reloj de tiempo real que lleva el tiempo de forma independiente, incluso cuando la Pi no está conectada a Internet. Eso incluye software que se pone en modo “sleep” cuando la batería ya está baja.

La batería puede durar por unas seis horas y el equipo ya está trabajando en baterías de 5 mil y 10 mil mAh que se estima, podrían durar entre 16 y 28 horas, respectivamente. Ahora bien, si una Raspberry Pi portátil suena de por sí interesante, entonces una idea del mismo equipo, la versión solar de su batería podría ser una opción interesante también. La PiJuice Solar está diseñada para que el usuario tenga un sistema autónomo totalmente, el cual podría usarse en cámaras de seguridad o estaciones climáticas, por poner un par de ejemplos. El equipo que desarrolla esta idea cree que una fácil portabilidad podría dar mucha más utilidad a la plataforma Pi. De hecho, ha diseñado un número de proyectos portátiles que serán de código abierto para la comunidad.

Una PiJuice cuesta unos 30 dólares, mientras que la versión solar se estima en 91 dólares. El proyecto en Kickstarter ya ha rebasado tres veces el dinero solicitado y si todo se da como el plan trazado, las primeras PiJuicie estarían llegando a quienes apoyaron el proyecto para finales de junio.

Referencias:

PiJuice