Con el posicionamiento de los teléfonos -que prácticamente contienen estudios completos en su interior-, el mercado de la tablets parecía estar debilitándose y sin mayores aportes en el horizonte.
Pero para quitar impresiones incorrectas, Apple está lista para lanzar al mercado su nueva línea de iPads, con todo y producto nunca antes visto.
La iPad Mini está de regreso (luego de tres años y medio sin renovaciones). En apariencia, es idéntica al modelo de 2015, pero en realidad llegan con actualizaciones por doquier. Tiene un chip A12 (el mismo del iPhone XS) y una pantalla de 7.9 pulgadas que es 25% más luminosa que la de otras iteraciones, y tiene soporte para el nuevo Apple Pencil.
A diferencia de la iPad Pro, esta iPad Mini tiene lector de huella digital y puede adquirirse en versiones de 64 GB y 256 GB, en plateado, gris espacial y dorado. La versión económica está en 399 dólares.
La iPad Air es más barata que la iPad Pro de 11 pulgadas y, al igual que la iPad Mini, también tiene chip A12 y representa un cambio significativo con respecto a las iPads que funcionaban con el chip A10x.
La nueva iPad Air puede comprarse en su versión de 64 GB por 499 dólares, o la versión de 256 GB por un precio mayor. También viene en colores plateado, gris espacial y dorado.
Ambos modelos soportan el Apple Pencil de nueva generación, que a su vez debe ser diferenciado de aquel que funcionaba con carga magnética.
Muchos pensaban que las iPads morirían para ceder su lugar a la nueva generación de iPhones, pero con estos nuevos lanzamientos parece que estaremos hablando de un reposicionamiento de las tabletas.
Habrá que estar atentos a la respuesta de la competencia.
