Activa las notificaciones para estar al tanto de lo más nuevo en tecnología.

¿Por qué hay que respaldar los datos?

Hace un par de semanas nos enteramos de un caballo de Troya (no califica como virus), el cual encripta la información de los datos del...

backup00

Hace un par de semanas nos enteramos de un caballo de Troya (no califica como virus), el cual encripta la información de los datos del usuario, archivos de texto, documentos, hojas electrónicas, etcétera, utilizando un esquema de criptografía lo suficientemente poderoso para que no pueda ser decodificado en un tiempo razonable. Los autores de este caballo de Troya, verdaderos delincuentes, entonces piden rescate a los usuarios afectados. Se habla de cantidades que van de 100 a más de 300 dólares para que los perversos personajes le envíen a la víctima la clave para decodificar la información que tuvieron a bien secuestrar. Si no se hace el pago reclamado en el tiempo que se pide, unas 100 horas máximo, la clave de decodificación se borrará y nadie en el planeta podrá regresarle sus datos como los tenía. La solución de pagar “el rescate”  no necesariamente soluciona nada, pues se reportan casos que la clave de decodificación no sirvió.

Pero éste es un caso extremo. Vayamos a otros más comunes: en la computadora que uso tengo un disco de un terabyte en donde respaldo la información. Probablemente he usado una cuarta parte de dicho disco. Hace unas tres o cuatro semanas, empecé a tener dificultades al encender la computadora, Tardaba horrores en entrar Windows 7 y evidentemente algo andaba mal. Por un tiempo pensé que era el sector de arranque, pero no fue así. En estos días revisé con atención lo que estaba pasando y hallé que el disco de un terabyte tenía problemas. Aparentemente leía el directorio pero cuando uno quería tener acceso a los archivos, el sistema decía “not responding”  y en el mejor de los casos, había que matar el proceso. Bajé algunas herramientas gratuitas de la red y revisé el disco en dificultades. Conclusión: tengo problemas para acceder mis datos ahí.

En dicho disco guardo respaldos de mi código fuente, los cuales están respaldados en otro disco (y tengo incluso copias antiguas en CDs), pero también tengo unos 100 GBytes de archivos de ajedrez y otros 50 GBytes de libros en PDF de física, electrónica y desde luego, programación. Todo es recopilación de algunos años de información hallada en la red. De esto no tengo todo respaldado y ahora lo lamento, porque quizás, no lo sé, no pueda recuperarlo (aunque en mi fuero interno piense que hay buenas posibilidades de recuperación por la falla que presenta el disco duro).

Pero el punto aquí es que es una manera absurda de sufrir. Si hubiese pensado que el disco de respaldo podía fallar como lo ha hecho, habría tomado mis previsiones. Y sí, no es información que no pueda recuperar, pues mucha de ella salió de Internet, pero el hecho es que ahora me hallo con una dificultad que pude haber evitado si hubiese hecho los respaldos sistemáticamente.

La tecnología es muy poderosa en estos tiempos, incluso para el consumidor final, pero eso no quiere decir que sea perfecta. Los circuitos electrónicos, los discos duros, las memorias, etcétera, no tienen palabra de honor y pueden fallar en cualquier momento. Solución: haga respaldos cada cierto tiempo o bien, utilice la nube, que aunque se tema que sus datos pueden ser vistos por otros, dudo que francamente le interese a alguien sus correos electrónicos, sus documentos, sus cartas o sus fotos.

Vamos, que la inmensa mayoría no tiene por qué tener problemas con la privacidad. La ventaja de la nube es que es programable para que cada cierto tiempo se respalde la información que le digamos. Así estaremos protegidos y la verdad, eso no tiene precio. Puede fallar el disco duro pero entonces todo se resuelve haciéndose de otro. Pero si nuestra información sólo está en el disco que no se puede leer, entonces estamos ante una crisis potencialmente. ¿Qué necesidad hay de eso?

Comentarios