Según su último reporte de salida a la bolsa (IPO), Uber invirtió 457 millones de dólares en 2018 para impulsar la investigación y el desarrollo de vehículos autónomos y automóviles voladores.
En la publicación, Uber destacó que, aunque planea trabajar con los socios conductores por muchos años más, la empresa cree fuertemente en el desarrollo de nuevas tecnologías de transporte.
«Creemos que la tecnología de vehículos autónomos habilitará un producto que competirá con el costo de adquirir y usar un vehículo personal, y que representa el futuro del transporte. Estamos invirtiendo profundamente en las tecnologías de vehículos autónomos, al igual que en Uber Elevate, que trabaja para transformar el mundo por medio de viajes aéreos compartidos a escala», explicó la empresa en el documento.
La unidad de vehículos voladores de la compañía de transporte, Uber Elevate, representó el año pasado un tercio de los gastos totales en investigación y desarrollo de la compañía de movilidad.
El transporte aéreo compartido de Uber está planeado para 2023 y serviría como una solución para moverse entre los suburbios y las grandes ciudades. En un principio, el servicio consistiría en una flotilla de vehículos voladores eléctricos en Dallas y Los Angeles.
