Mega Man, uno de los personajes más populares en la historia de los videojuegos, tendrá próximamente una adaptación live action que estará a cargo de Netflix junto con la casa productora detrás de las películas Actividad Paranormal 3 y 4.

Netflix cancela Cowboy Bebop tras un desplome de 59 por ciento en audiencias

De acuerdo con información de Rockman Corner, la casa productora Supermarché -propiedad de Henry Joost y Rel Schulman-, comunicó en la sección de noticias de su sitio web que dentro de sus próximos proyectos está programada una adaptación live action basada en el bombardero azul de Capcom.

El sitio menciona que “Henry, Rel y su productora interna Orlee-Rose Strauss mantienen una lista de proyectos en desarrollo. Las obras en las que están trabajando incluyen una adaptación de MEGA MAN de Capcom para Chernin Entertainment y Netflix, que escribieron y están dirigiendo….”

No es la primera vez que se habla de una película inspirada en Mega Man, en 2018 Chernin Entertainment, la misma compañía que figura en el sitio web de Supermarché, ya estaba trabajando en una adaptación del juego, el nuevo elemento aquí es la incorporación de Netflix a la ecuación.

En ese mismo año Capcom anunciaba con bombo y platillo que “tiene como objetivo atraer a una audiencia diversa, que incluye no solo a los jugadores, sino también a los fanáticos de las películas de acción, con una adaptación que mantiene el mundo de los juegos de Mega Man…”

Hasta este momento no se conoce fecha exacta del estreno de la producción.

Netflix en espera de tener éxito con Mega Man

El record de Netflix adaptando videojuegos o animes a su servicio de streaming ha sido bastante irregular hasta el momento.

Por un lado ha tenido grandes aciertos como lo fueron la serie animada de Castlevania, inspirada en la franquicia de Konami o más recientemente la exitosa Arcane, que fue aclamada por la crítica por su adaptación del universo de League of Legends así como por la calidad de su animación.

Caso contrario son las versiones live action de Cowboy Bebop o Death Note, que no tuvieron el éxito que tenían planeado.