Quizá no lo sepas, pero existe un Salón Internacional de la Fama de los Videojuegos. Está ubicado al interior del Museo Nacional del Juego Strong, en Rochester, Nueva York y abrió en 2015.

Sus criterios para que un juego sea inducido incluyen que tenga estatus de ícono, que sea longevo, que tenga alcance geográfico y que sea influyente, y dentro de los títulos que forman parte de él figuran el original DOOM, el primer Mortal Kombat, Street Fighter II, Grand Theft Auto III, Pac-Man y Super Mario Kart.

Evidentemente ese Salón está hecho para el panorama internacional de los videojuegos, pero ¿qué hay de la escena latinoamericana?

Con esa inquietud en mente, en el marco de la primera edición de Gaming Week MX se anunció la creación del Salón de la Fama del Videojuego Latino, una iniciativa que tiene como propósito reconocer y rendir tributo a aquellos títulos, sucesos y personalidades que han hecho que esta industria se mantenga en alto en nuestra región.

De esta manera, el Salón de la Fama del Videojuego Latino contará con cuatro categorías principales:

  1. Personalidad de la industria latinoamericana (se entregará atendiendo a tres grados: Leyenda, Héroe o Impulsor)
  2. Videojuego o proyecto latinoamericano trascendental
  3. Talento Latino en un videojuego internacional
  4. Momento clave en la escena latinoamericana

A diferencia del Salón Internacional, el Salón de la Fama del Videojuego Latino no contará con un recinto dedicado enteramente a él, sino que habrá espacios físicos para la develación de las placas conmemorativas -empezando por Arena The Place to Play.

Junto con la presentación del Salón, se anunció que Gus Rodríguez fue la primera personalidad inducida (en grado Leyenda), en atención a su labor de difusión de la cultura del videojuego -rastreable hasta la década de los 90 con proyectos como Club Nintendo y Nintendomanía– y quien perdió la vida en este 2020.