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Prueba 1: Photobook.

Hoy, terminé un pendiente que tenía atrasado desde el 2005. En realidad, fue la curiosidad lo que me llevó a saldar esa deuda (con mi...

Hoy, terminé un pendiente que tenía atrasado desde el 2005. En realidad, fue la curiosidad lo que me llevó a saldar esa deuda (con mi madre, por supuesto). Desde hace años, me pedía que imprimiera las fotos digitales. Yo decía, “sí, sí, es que no he tenido tiempo” (Pues sí, tiempo, nunca tenemos, por eso hay que hacerlo). Y por azares del destino, ayer descargué una aplicación que habíamos visto en este video y hoy empecé a usarla.

En la vida había hecho un photobook y he de admitir que el proceso más largo fue organizar mis fotos de tantos años (para ser exactos, desde el 2002). Ingresé a fotosmile porque me latió y descargué el software para crear álbumes (también hay para calendarios y postales). El programa (que funciona en PC y Mac) tiene una interfaz muy sencilla. Puedes hacer un álbum express con funciones predeterminadas o dedicarle un buen tiempo a los diseños de fondo, plantillas, marcos y textos. El costo puede ser desde 150 pesos hasta 1,500 (según el presupuesto de cada quien).

En lo personal, quedé maravillada. ¡Qué fácil fue hacer mi álbum! (esque ya empecé a hacer el mío, je,je). Abres un archivo, cargas las fotos por carpetas y las arrastras en tu “área de trabajo”. Si quieres lo decoras. Una vez que lo terminas, verificas que no tenga errores (con una función especial) lo mandas a imprimir y afortunadamente tiene una opción para que veas un pdf de prueba.

Si las fotos, texto y diseño están en orden envías tu álbum por la red o lo copias a USB o CD, para enviarlo a las instalaciones. Como me urgía acabar con el proceso, escogí enviarlo por internet. Te registras en la página, verificas los datos, escoges un método de pago (ya sea crédito o depósito) y listo. Si pagas, tardan de 8 a 10 días en entregarte tu photobook.

Por ahora quedé muy contenta. Sobretodo porque, si todo sale bien, terminaré mis otros 5 Gigas pendientes sin tener que ir a imprimir las fotos y pegarlas manualmente. Es cuestión de gustos, pero a mí las fotografías me gustaría imprimirlas siempre. Eso sí, esperemos que el método de entrega sea igual de sencillo.

¿Y ustedes, tienen photobooks o prefieren los marcos digitales?

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