La Raspberry Pi es una computadora del tamaño de una tarjeta de crédito, de muy bajo costo, alrededor de 35 dólares, y que permite a todos acceder de forma económica al compúto moderno.

Hay que conectarle un monitor (soporta HDMI) y no tiene disco duro. Funciona con una tarjeta SD de 4, 8, 16 o 32 GB, que es donde se pueden guardar datos y aplicaciones.

Usa una modificación de Debian Linux, llamada Raspbian, y sin duda es una de las grandes creaciones de los últimos tiempos para que todo el mundo pueda entrar al desarrollo y uso de la computación y programación.

La Raspberry Pi 4 de 1GB

La Raspberry Pi 4 (con 1GB) tiene ya un año de haber salido públicamente. De esta máquina se vendieron, a unos 45 dólares, unas 3 millones de unidades. Algunas modificaciones menores y una reducción a 35 dólares por la versión de 2GB fue un ganador.

Por otra parte, en lo que se refiere a software, se sigue trabajando en ello y ya es compatible con OpenGL ES 3.1, además de trabajar sobre un manejador de Vulkan (que se supone sustituirá a OpenGL), aparte de innovaciones como arrancar desde una unidad de almacenamiento masivo, aunque esto parece ser un prototipo.

Y la Fundación Pi indica que mientras lanzaban los modelos de 1, 2 y 4 GB, ya manejaba la idea de hacer una Pi de 8GB. Y tan emocionante era la idea que decidieron incluir la posibilidad en el manual del usuario.

Las dificultades para una versión de 8GB

El chip BCM2711, que usa la Pi 4, tiene una dificultad: sólo puede acceder a 16GB de LPDDR4 SDRAM y entonces el problema es que agregar memoria no sería un asunto trivial, porque no hay un paquete de 8GB de RAM que sea posible usar.

Y de hecho, en el 2019 en términos reales simplemente hacer una nueva Pi con 8GB parecía imposible. Pero la gente de la empresa Micron se puso a trabajar y diseñó el paquete necesario, por lo que ahora se anuncia la Raspberry Pi 4 de 8GB, cuyo costo es de 75 dólares.

Poniendo las cosas en perspectiva

¿Cuánto son 8 GB de RAM? Pensemos en la frase de Bill Gates, que decía que 640 KB serían más que suficientes para cualquier aplicación (aunque la cita parece ser apócrifa).

8GB son unas 13 mil veces esta cantidad de memoria, lo que en términos modernos permite desarrollar software más complejo, que requiera más recursos y más carga de trabajo. Vamos, si usted no es desarrollador, puede pensar que con esa memoria podrá abrir más pestañas en su navegador.

Pero evidentemente esto no es lo único nuevo. Por ejemplo, la Pi originalmente usaba un sistema operativo de 32 bits y esto permite múltiples procesos, con la condición que ninguno de ellos fuese mayor a 3 GB.

Esto no es realmente una restricción para el usuario promedio. Pero siempre hay usuarios poderosos que quisiesen usar los 8GB en un solo proceso, y para ello piensan en el mundo de los 64 bits. Para ellos hay Linux como Gentoo o Ubuntu. Sin embargo, la Fundación Pi salió con su versión de Debian de 64 bits, la cual es trabajo de la propia fundación.

Así, ahora hay Raspbian de 32 y 64 bits, y a este último le han llamado Raspberry Pi OS.

La idea de este cambio de nombre es que los clientes de la Pi se sientan cómodos y confiados usando el sistema operativo sugerido por la propia empresa. Por ello se realizarán una serie de actualizaciones en todas las imágenes, es decir, los sistemas operativos que tiene la Fundación Pi para descargar, para reflejar este nuevo nombre.

Así pues, cómputo moderno a realmente una fracción del costo. Un esquema de ganar-ganar.