Si tuviéramos que recordar a B.B. King con un objeto, sin lugar a dudas sería a través de su emblemática guitarra, Lucille. Sin embargo, para ofrecer más de 100 conciertos al año, el “Rey del blues” no escatimó en el uso de la tecnología.
King, considerado como uno de los más grandes guitarristas de todos los tiempos, iba de aquí para allá, ofreciendo prácticamente 3 conciertos por semana, en un peculiar autobús, equipado con cualquier cantidad de adaptaciones electrónicas y donde, hasta los últimos días de su vida, tuvo acceso a una envidiable librería musical y videoteca, conformadas por más de 30 mil títulos.
El recinto de King fue diseñado específicamente para integrar un servidor particular, sistema de TV satelital, 6 monitores, equipo de edición de video y audio, entre otras instalaciones que le permitían estar cerca de la acción. B.B., fallecido el pasado jueves 14 de mayo a los 89 años de edad, pudo mantenerse al día en todo momento gracias a su apertura hacia la tecnología.
Entre el equipo electrónico integrado en el autobús de King se encuentran el servidor, 4 grabadoras digitales de video, 4 reproductores HD, al menos 5 puertos para reproductores MP3, 3 reproductores de Blue-Ray, PS3, XBox One, sistema de iluminación, cámaras HD, sistema de audio Surround, sistema de comunicación interna, computadoras, pantallas touch y conexiones y puertos por todo el vehículo, entre otros gadgets que en total representan una inversión cercana a los $140,000 dólares. El valor del autobús se estima en alrededor de $1,000,000 de dólares.
King siempre fue un entusiasta de la tecnología. Incluso antes de vivir parcialmente de gira en este autobús, el padre del rock contemporáneo utilizaba todo tipo de plataformas multimedia.
Referencias: Rolling Stone, CI