Hace algunos meses fue lanzado Boxee, un programa que se instala en la computadora y permite acceder “contenidos” dentro de Internet. ¿Qué son los contenidos? En realidad se pueden dividir en dos grandes grupos: los que tienen derechos de autor y los que pertenecen al dominio público. La gran controversia desde hace años se centra en el primer grupo, es decir, el material que se explota comercialmente.

En ese sentido, para nadie es un secreto que las “redes punto a punto” han puesto en la pantalla de millones de computadoras contenidos por los cuales el usuario no ha cubierto ni un centavo. Películas y música es lo que más se copia (piratea) por la red y el tema parece no tener fin. La forma clásica de hacer esto es acceder a un software de descargar y buscar lo que se necesita. Una vez completado el proceso, el usuario tendrá uno o más archivos en su PC desde donde podrá disfrutarlos. Si se trata de música, es muy sencillo copiarla a cualquier reproductor. Si se trata de video, las cosas se complica técnicamente.

A pesar de este panorama sombrío para los dueños de los derechos de autor y las distribuidoras, parece que los contenidos a través de Internet llegaron para quedarse. Algunas estaciones de televisión están ya experimentando el ofrecer sus programas y series usando la red como medio. Han encontrado la forma de meter comerciales y, para ellos, la ecuación sigue siendo la misma: contenidos gratis a cambio de pautas publicitarias.

Todo eso sucede en su mayoría en los Estados Unidos. ¿Qué queda para otras regiones, incluida México? La respuesta pueden ser servicios como Boxee, que utilizando los principios de una red social, permite “encontrar” contenidos que se encuentran en la red… y en otras computadoras alrededor del mundo.

Descargarlo es muy sencillo y la instalación no tiene problema. Se acaba de liberar la versión para Windows (anteriormente estaba disponible para Mac y Linux) y con esto, el acceso para millones de usuarios, abarcando la gran mayoría del mercado.

¿Para qué sirve?

En lugar de encender la televisión, mucha gente está quedándose en la pantalla de su computadora. Con Boxee es posible encontrar contenidos en video de muy diversas fuentes. Desde las cadenas de noticias hasta algunos videos exóticos, pasando por servicios específicos en Internet como Hulu (videos) y NetFlix (renta de películas). La parte de “red social” permite que el usuario se registre, tenga amigos y vaya construyendo su “red”. Con esta información, Boxee va registrando todo lo que cada quien ve y llega la magia: recomendaciones.

Estas recomendaciones se basan en lo que han visto los amigos del usuario, por lo que suelen tener más o menos suerte de encontrar contenido que valga la pena.

Los ingredientes.

Mucha gente no se siente confortable consumiendo video en la pantalla de la PC. Por eso, Boxee y otras opciones han migrado a diferentes equipos destinados para la televisión. Así, hoy está disponible la versión para Apple TV, quedando pendientes las futuras versiones para consolas de video juegos como Xbox y PlayStation de Sony.

¿Será el futuro?

Tema del eterno debate, la respuesta rápida es: sí. La respuesta más explicada tiene que ver con los hábitos de consumo, la edad del consumidor y, claro, la parte más importante de la ecuación: los anunciantes. Mientras sigan consiguiendo promover sus productos, es seguro que este medio de transmisión encontrará más y más adeptos que aplicarán una de las razones de su existir: el propio usuario decide qué ver y en qué horario. No hay imposiciones por parte de las estaciones de radio o televisión.

Para descargarlo en su propia computadora, sólo hay que visitar el sitio boxee.tv, registrarse como usuario, descargar el software y correrlo. Es muy importante la velocidad de conexión a Internet. Hemos hecho pruebas con una tradicional a 2Mb y funciona aceptablemente bien. Todo el video que hemos podido ver no es en alta definición, para eso se requiere más ancho de banda.

Habrá que esperar a conocer lo que están preparando los fabricantes de televisiones… Así es. Estas empresas están al pendiente y, por supuesto, interesadas en conectar sus aparatos a Internet, para intentar revertir o mitigar el hecho de que mucha gente está optando por otro tipo de contenido. Ya existen en el mercado los primeros modelos, si embargo, estos se limitan a ofrecer navegación con los sitios tradicionales de video. Aquí, en el presente y en el futuro, aplica la máxima de que el contenido, afortunadamente, es el rey.