Activa las notificaciones para estar al tanto de lo más nuevo en tecnología.

Videojuego de fitness para los discapacitados físicos

Las personas con discapacidades poco comunes pueden tener dificultades en el desarrollo de una rutina de ejercicios que se adapte a sus necesidades únicas. En...

talido

Las personas con discapacidades poco comunes pueden tener dificultades en el desarrollo de una rutina de ejercicios que se adapte a sus necesidades únicas. En el Instituto Fraunhofer de Circuitos Integrados en Erlangen, Alemania un equipo académico se ha asociado con las víctimas de la talidomida para crear un videojuego para tabletas con el objetivo de ejercitar a los pacientes.

La talidomida, que fue desarrollada por la compañía farmacéutica alemana Grünenthal GmbH, es un fármaco que fue comercializado entre los años 1958 y 1963 como sedante y como calmante de las náuseas durante los tres primeros meses de embarazo (hiperémesis gravídica).

Como sedante tuvo un gran éxito ya que, en un principio, se creyó que no causaba casi ningún efecto secundario y, en caso de ingestión masiva, no resultaba letal. Sin embrago, este medicamento provocó miles de nacimientos de bebés afectados de focomelia, anomalía congénita que se caracterizaba por la carencia o excesiva cortedad de las extremidades.

El juego se basa en una hombrera con sensores que monitorean constantemente el movimiento del jugador, convirtiendo el movimiento físico en acciones de los personajes en la pantalla. Otro control se encuentra en el asiento, dejando que los pacientes utilizen las nalgas como mando, mientras que el reconocimiento de voz proporciona una interacción adicional con el juego, todo mediante comunicación Bluetooth.

Además, el juego es interactivo, ya que los jugadores pueden comunicarse con otras personas a través de webcam mientras compiten unos contra otros.

“Nuestro proyecto no es sólo sobre el desarrollo de tecnología innovadora, los prototipos fueron creados en conjunto con la gente que sabe muy bien lo que significa vivir con limitaciones físicas, las víctimas de la talidomida. Estos voluntarios estuvieron dispuestos a compartir sus estrategias personales para hacerle frente de una mejor manera a los desafíos de la vida cotidiana”, dijo Karolina Mizera, coordina del proyecto.

Referencia: Fraunhofer

Comentarios