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El primer implante de una vena bioartificial

Médicos del Hospital de la Universidad de Duke han anunciado con éxito el primer implante de un vaso sanguíneo bioartificial creado en el laboratorio por...

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Médicos del Hospital de la Universidad de Duke han anunciado con éxito el primer implante de un vaso sanguíneo bioartificial creado en el laboratorio por la compañía Humacyte. El primer paciente en recibir el implante fue un hombre de 62 años con insuficiencia renal que tras dos horas de cirugía recibió el injerto de vena el pasado 5 de junio.

La vena fue diseñada mediante el cultivo donado de células humanas en un andamio tubular para formar un recipiente que es especialmente tratado para limpiar todas las cualidades que podrían desencadenar una respuesta inmune de rechazo.

“En las pruebas pre-clínicas, las venas han obtenido mejores resultados que otros implantes sintéticos y de origen animal. Este es un evento pionero en la medicina”, dijo Jeffrey H. Lawson, MD, PhD, cirujano vascular y biólogo vascular de la Universidad de Duke.

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) aprobó recientemente un ensayo de fase 1 que incluyó a 20 pacientes en diálisis en los Estados Unidos. La prueba inicial se centra en el implante de los vasos sanguíneos en un lugar de fácil acceso en los brazos de los pacientes renales en hemodiálisis.

Vessel

Millones de personas en todo el mundo requieren hemodiálisis, y a menudo requiere un injerto para conectar una arteria a una vena para acelerar el flujo de sangre durante el tratamiento. Las opciones actuales tienen inconvenientes ya que los injertos vasculares sintéticos son propensos a la coagulación, causando frecuentes hospitalizaciones. Este injerto además podría usarse para derivaciones coronarias o para sustituir vasos bloqueados en las extremidades.

Inicialmente, los investigadores intentaron desarrollar venas utilizando las propias células de una persona para hacer crecer los andamios, reduciendo el riesgo de que el cuerpo del paciente rechace el tejido implantado. Pero debido al largo tiempo que requiere su producción en masa fue descartado, por lo que los investigadores cambiaron de rumbo para desarrollar un producto universal utilizando tejido humano donado.

“Cuando se implanta en los animales, los injertos venosos adoptaron efectivamente las propiedades celulares de un vaso sanguíneo. Ellos no sólo evitan el rechazo además son indistinguibles una vez que las células comienzan a poblar el implante”, agrego.

Sin duda un gran avance en la medicina que promete muchos beneficios, ahora los investigadores solo esperan que funcione de igual manera en los humanos a como fue en los animales.

Referencia: Humacyte y Universidad de Duke

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