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El día que los robots se volvieron juguetes mainstream

¿En qué momento llegamos al punto en el que un robot se volvió un juguete mainstream? Desde que se anunció BB-8 (el juguete robot basado...

BB8 DROID

¿En qué momento llegamos al punto en el que un robot se volvió un juguete mainstream? Desde que se anunció BB-8 (el juguete robot basado en el droid de Star Wars) me puse a pensar en todo lo que implica que algo así exista hoy en día. BB-8 no es sólo un juguete y ya, es una historia que involucra avances tecnológicos, costumbres sociales y cultura pop.

Claro que hace ya tiempo que tenemos esferas que giran, peluches animados con partes robóticas y tamagotchis; pero este pequeño fenómeno de Star Wars es justo la complilación de todo eso. Si bien desde hace años ya se podía pedir un robot como regalo de Navidad, ahora ya no tenemos que estar particularmente interesados en la tecnología para quererlo… eso es lo interesante de este droid.

BB8 DROID 2

La verdad es que BB-8 tiene funciones muy simples y no es un robot súper avanzado, pero para llegar al punto en que culquiera puede comprarlo por sólo 150 dólares (sí, aunque el dólar ande en 17 pesos) muchas cosas tuvieron que pasar. Primero que nada, esto no habría sido posible sin tecnologías utilizadas para proyectos más especializados como drones; y segundo, tampoco habría sido posible sin un interés social en juguetes como los coches a control remoto. BB-8 tampoco existiría sin las spheres que muchos consideraron ridículas en su momento. Y por si fuera poco, este robot tampoco existiría como tal sin que los smartphones hubiesen evolucionado tanto en este corto tiempo. Si notan una constante aquí es porque la hay: la humanidad parece estar muy interesada en la exploración… y la siguiente frontera es el espacio (de ahí se desprende el renacimiento de Star Wars y sus productos).

Si lo consideramos más a fondo, este juguete es como una evolución y mezcla de objetos, conceptos e intereses que ya existían. La gran diferencia entre un coche a control remoto y este pequeño robot es que todo progresa. Ahora, en vez de tener un coche de plástico tenemos un droid con más capacidades; y en vez de tener un control enorme que ofrece movimientos limitados, tenemos un smartphone que controla todo a través de una amigable app.

Bajo esta lógica, algo como BB-8 es muy relevante para el futuro. Si bien en este momento se trata de un divertido droid con capacidades básicas, en unos años un robot con inteligencia artificial y cámaras podría volverse lo que todo fan de una serie quiere comprar. Si algo nos enseña la ciencia ficción es que los temas de sus contenidos son preocupaciones reales para la humanidad, y si algo nos enseña el lanzamiento comercial de un robot como BB-8 es que la gente tiene curiosidad por llegar cada vez más lejos y hacer de tecnologías ficticias una realidad.

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